El índice de precios al consumidor brasileño subió un 0,57% en septiembre, según una encuesta del IBGE (Instituto Brasileño de Estadística), después de haber subido ya un 0,25% en agosto. Según Eulina Nunes dos Santos, coordinadora del índice del IBGE, el aumento estuvo determinado por el crecimiento de los precios de la carne, que creció el 3,17%, el porcentaje más alto desde octubre de 2013.
“Los agricultores se quejan de que los pastos aún están muy secos”, comentó Santos durante una conferencia de prensa. La aridez de la tierra haría más difícil y costoso alimentar a los animales. La demanda extranjera de carne brasileña también contribuiría a precios locales más altos. Los vuelos aéreos también crecieron (+17,85%). Durante el año, la inflación aumentó un 4,61%, ubicándose en 6,75% y por lo tanto posicionándose por encima de la meta del gobierno establecida en 6,5%. Una encuesta realizada por el banco central de Brasil reveló que los economistas redujeron sus estimaciones de crecimiento económico de 0,29 por ciento a 0,24 por ciento este año.
