Tras el deterioro registrado a finales de año, la economía de la zona del euro debería estabilizarse en este primer trimestre y registrar el inicio de una fase mejor entre abril y junio. "Se vislumbra una recuperación moderada", según las habituales previsiones conjuntas sobre la unión monetaria que publica el Istat junto con el instituto hermano francés Insee y el centenar de estudios alemanes Ifo. En el tercer trimestre de 2012, el PIB disminuyó un 0,1% y "se espera que siga contrayéndose incluso en el cuarto", según un comunicado.
Una aceleración de la recesión de al menos un 0,4%, "como anticipaban el bajo nivel de confianza registrado por las encuestas y el fuerte descenso de la producción industrial en octubre". Se espera una tendencia invariable para el primer trimestre, con un crecimiento nulo y, tras esta "fase de estancamiento", continúa la nota, "el segundo trimestre registrará una recuperación moderada del PIB": +0,2% según los tres institutos.
La recuperación estuvo impulsada por la aceleración de la demanda mundial debido a un mayor dinamismo de los mercados emergentes, junto con el reciente acuerdo sobre el "abismo fiscal" en Estados Unidos, que debería limitar posibles efectos negativos sobre la recuperación de la economía americana.
