Después de meses de rumores e indiscreciones, ha llegado el anuncio oficial. El Consejo de Ministros celebrado esta mañana, 13 de abril, ha decidido incorporar Anas, la empresa que gestiona la red de carreteras y autopistas, a los Ferrocarriles del Estado. Así lo establece una disposición contenida en el decreto de corrección de cuentas junto a la maniobra de 3,4 millones de euros en la que el Ministerio de Economía y el Palazzo Chigi han estado trabajando intensamente en las últimas horas.
Según ha escrito el diario La Stampa, la decisión del Gobierno no tiene nada que ver con el antiguo proyecto de fusión previsto en el pasado reciente por el Ministerio de Infraestructuras, pero la disposición prevé el traspaso de Anas al grupo Ferrovie, que pasa a ser jefe de la empresa vial.
Además, según los primeros rumores, la nueva entidad se mantendrá fuera del perímetro de la Administración Pública para no sobrecargar la deuda que se contraerá por inversiones en el presupuesto estatal. Sin embargo, para que esto sea posible, tendrá que llegar el visto bueno de Eurostat.
La incorporación creará un polo nacional de infraestructuras capaz de garantizar, según cálculos iniciales, hasta 7,2 millones de euros de inversión pública y privada, con una facturación de 10 millones de euros y 75 empleados.
