El consejo de administración de Toshiba (+1% en bolsa hoy) aprobó la decisión de recurrir al procedimiento concursal del Capítulo 11 para Westinghouse, con una iniciativa encaminada a intentar limitar las enormes pérdidas que la filial estadounidense en el sector nuclear está causando al grupo. Lo escribe hoy el diario japonés Nikkei.
Westinghouse emplea a 12 personas en todo el mundo y el grupo japonés no ha ocultado su orientación hacia la desvinculación, después de que el semáforo en rojo de la compañía estadounidense haya impedido incluso la comunicación de los datos de los estados financieros del grupo hasta el momento (las pérdidas se estiman en un orden superior a 6 mil millones de dólares).
Con el expediente Chapter 11 en Westinghouse (del que había adquirido el 77% en 2006 por 490 millones de yenes, para luego subir al 87%), Toshiba planea iniciar su recuperación, que también incluye la venta de su joya de la corona: la división de chips. (que muchos en el gobierno japonés consideran estratégico, hasta el punto de prepararse para intervenir o al menos condicionar la venta, vetando a los compradores no deseados).
