La producción industrial japonesa aumentó un 0,6% en julio. El valor, aunque positivo, revela una fuerte desaceleración si se compara con el 6,2% registrado en mayo y el 3,8% de junio. Además, la cifra es inferior a las expectativas, que estimaban un crecimiento del 1,5%. Así lo aseguró esta mañana el Ministerio de Industria y Comercio Internacional (METI) en Tokio.
También en julio, las entregas aumentaron un 0,2% con respecto a junio, mientras que los inventarios disminuyeron un 0,2% con respecto al mes anterior. Los sectores que impulsaron el crecimiento fueron los sectores automotriz y de componentes para automóviles.
Según una encuesta del gobierno, los principales productores manufactureros de Japón esperan un crecimiento del 2,8% para agosto y una caída del 2,4% en septiembre.
