La planta rusa de Fiat se abrirá en San Petersburgo. Al menos, eso es lo que informa la agencia de noticias rusa Ria Novosti. Sin embargo, desde hace un tiempo, Sergio Marchionne, director general de Lingotto, manifestó su intención de volver a invertir en el país al manifestarle al gobierno ruso su voluntad de crear una planta para 20 autos al año.
La inversión debería acercarse a los mil millones y entre las posibles áreas para la nueva planta más allá de San Petersburgo, donde por razones logísticas se ubican muchas fábricas de grupos extranjeros como Toyota y Nissan, se ha hablado de un sitio en el distrito federal de la Volga y sus suburbios de Moscú.
Rusia ha vuelto a ocupar el primer plano de la atención de Lingotto, junto con China (donde Fiat ya tiene una empresa conjunta), después de que la situación del mercado estadounidense haya restringido cada vez más las perspectivas de crecimiento. En tanto, las ventas en el país también crecieron, aumentando un 17% en julio (automóviles y vehículos comerciales ligeros, a 2.325 unidades) respecto al año anterior. En los primeros siete meses del año, Fiat vendió así 16.807 unidades (+59%, según la Asociación de Empresarios Europeos). Al mismo tiempo, el mercado ruso registró un crecimiento del 27% en julio y del 50% en los primeros siete meses, respectivamente.
