Las empresas estadounidenses frenan el aumento de los inventarios industriales. En junio, el indicador registró un crecimiento del 0,6%, equivalente a casi la mitad de lo esperado en las estimaciones de los analistas, es decir, del 1%. El crecimiento más lento de lo esperado es una señal de cautela por parte del sistema empresarial estadounidense y da la cifra del grado de incertidumbre que caracteriza la fase económica. En resumen, las empresas estadounidenses no creen en un aumento significativo de la demanda a corto plazo y, por lo tanto, no ven ninguna razón para aumentar mucho sus inventarios. Por tanto, la cuota medida en junio se detiene en 458,67 millones, según el Departamento de Comercio, que también se vio obligado a corregir a la baja los resultados de mayo: +1,7 en lugar de +1,8%.
Sin embargo, los datos de ventas mejoran, mostrando una recuperación desde mayo, cuando bajaron un 0,3%, y subieron un 0,6%, por un valor de 395,84 millones de dólares. Finalmente, la relación inventario-ventas se mantuvo constante, aún en 1,16 puntos.
