Adiós al peronismo en salsa kirchneriana. En la papeleta para la elección del nuevo presidente de Argentina, según pronósticos, el candidato liberal de centroderecha, Mauricio Macri, un ingeniero de origen italiano de 56 años, líder de "Cambiemos" tras haber sido alcalde de Buenos Aires y presidente del club de fútbol Boca Juniors.
Macri recogió el 51,4 % de los votos frente al 48,6 % del candidato peronista Daniel Scioli, apoyado por la presidenta saliente Cristina Krchner y también de origen italiano.
El nuevo presidente promete acabar con el peronismo recortando el asistencialismo y acabando con el aislacionismo internacional con la apertura de nuevas relaciones tanto con Estados Unidos como con Europa.
El desafío que le espera a Macri es uno que hace temblar las muñecas porque Argentina está en medio de una crisis económica pero el líder de 'Cambiemos' ha interpretado el deseo de cambio que, más allá de las barreras políticas e ideológicas, anima al pueblo argentino hoy después de la desfavorable experiencia de Kirchner.
Con la presidencia de Macri, hijo de un empresario de origen calabrés con quien, sin embargo, rompió relaciones por su entrada en la política, también deberían mejorar considerablemente las relaciones entre Argentina e Italia, que está presente en el país sudamericano con muchos de sus empresas, de FCA a Telecom, de Pirelli a Tenaris y Enel-Endesa.
Macri, a quien Scioli telefoneó de inmediato para reconocer su éxito electoral, ingresará a la Casa Rosada el 10 de diciembre.
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