"Para el viernes" entrarán en vigor las nuevas sanciones económicas de la Unión Europea contra Rusia por su papel en la crisis de Ucrania. Así lo ha anunciado hoy en Bruselas la ministra de Exteriores italiana, Federica Mogherini, que a partir de noviembre asumirá el papel de alta representante para la política exterior de la UE. Las sanciones serán preparadas en los próximos días por el Coreper, el comité técnico de los representantes permanentes de los estados miembros que prepara las reuniones del Consejo.
En una audiencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo, ante la que presentó las prioridades del semestre de presidencia italiana de la UE, Mogherini explicó que "mañana la Comisión Europea presentará la lista de nuevas sanciones al Coreper, que también el jueves" para discutirlos y permitir su aprobación al día siguiente. Si bien el ministro italiano aún no preside el Consejo de Asuntos Exteriores (Catherine Ashton permanece en el cargo hasta el 30 de octubre), la presidencia italiana lidera el Coreper y, por lo tanto, tiene la responsabilidad de finalizar el trabajo técnico para el lanzamiento de las nuevas sanciones decididas por el Consejo Europeo el pasado sábado.
Las intervenciones contra Rusia, agregó Mogherini, se referirán "al sector financiero, comercio de armas y aplicaciones tecnológicas", pero también se discutirán "los criterios para ampliar la lista de personas e instituciones afectadas". El ministro italiano ha utilizado repetidamente la expresión "agresión rusa" para describir la situación en Ucrania. Y refrendó las palabras pronunciadas ayer por el presidente alemán, Jaochim Gauck, según quien “con el conflicto en Ucrania, Rusia ha puesto fin de hecho a su asociación estratégica con la UE. Si bien nos interesa imaginar que se puede trabajar para restaurarlo, esta no es la situación en la que nos encontramos ahora, debido a las decisiones rusas. Moscú sigue siendo un jugador estratégico en la región, pero ya no es un socio".
Mogherini subrayó que la UE salió de la reunión informal del Consejo en Milán y de la cumbre de la UE del sábado “unida y hablando con una sola voz: necesitamos trabajar hacia una solución política, porque no hay una solución militar. Todos estamos de acuerdo en esto, quizás no aquí, pero sí en el Consejo de la UE”, añadió en respuesta a las palabras de desaprobación de algunos eurodiputados del Este.
La UE apunta a "un alto el fuego duradero en ambos lados -prosiguió el jefe de la Farnesina-, el cese de la entrada de armas y personal militar, la liberación de los rehenes y el acceso ilimitado a la zona en la que derribó el avión de Malaysian Airlines . No es solo un deber moral hacia las víctimas: ese evento le dio una dimensión global a esta crisis”. Finalmente, ante la inminencia de la cumbre de la OTAN en Gales, el ministro ha señalado que "todos los países de la Alianza que tienen frontera común con Rusia deben saber que el artículo 5 (del Tratado del Atlántico Norte, que prevé la asistencia mutua en caso de agresión, ed) no está sólo en el papel”.
