Pirelli volvió a obtener ganancias en 2016. La empresa cerró con un resultado neto positivo de 147,6 millones euros que se compara con una pérdida de 383,5 millones en 2015 cuando pesaron partidas extraordinarias. El resultado operativo ascendió a 724,2 millones de euros (frente a 786,1 millones en el período correspondiente de 2015 en términos comparables) y "refleja principalmente 66,6 millones en cargos no recurrentes y de reestructuración debido a la racionalización y los costos relacionados con la reorganización del segmento Industrial y 105,8 millones de euros correspondientes a la amortización de activos intangibles derivados de la compra de activos de Pirelli por parte de Marco Polo”, explica la compañía. El Ebit ajustado, por su parte, muestra un aumento de 860,5 a 896,6 millones.
Los ingresos ascienden a 6,06 millones de euros, con un crecimiento orgánico del 7% anual (permeable y neto del efecto del tipo de cambio, negativo del 5,4%) y del 8,7% en el cuarto trimestre. La posición financiera neta fue negativa en 4,9 millones de euros, una mejora de 418,2 millones de euros en comparación con los 5,3 millones de euros de finales de 2015. “La tendencia positiva -subraya Pirelli- se debe principalmente a la elevada generación de caja, así como a la recaudación de 266 millones de euros derivada de la entrada , con una participación del 38%, del fondo chino Cinda en el capital de Pirelli Industrial como parte del proyecto de reorganización del negocio industrial”.
