La industria se detuvo en Europa. Tras los datos negativos de Alemania (-3,5% en diciembre, -6,8% interanual) y Francia (-2,8%, -3% interanual), le sigue también Italia, que cierra 2019 con signo negativo. La producción industrial disminuyó un 1,3% en el año tanto en términos brutos como netos de efectos de calendario. Esta es la primera disminución desde 2014 y la mayor disminución desde 2013. Teniendo en cuenta los efectos de calendario en términos de tendencia el descenso es del 4,3%. Istat lo comunica en su informe mensual.
En diciembre, la producción industrial italiana cayó un 2,7% respecto a noviembre (índice desestacionalizado). Pasando al cuarto trimestre, la caída en términos cíclicos es del 1,4%. El dato supone el descenso más acusado desde el cuarto trimestre de 2012, así como el tercer rojo consecutivo tras los del segundo y tercer trimestre de 2019. Aplicando estándares de PIB, se podría decir que el sector atraviesa una fase de "recesión". ".
“En general, en 2019, la producción industrial mostró una disminución en comparación con el año anterior, la primera desde 2014. – comenta Istat – Entre los principales grupos de industrias, la disminución fue más marcada para los bienes intermedios, menos marcada para los bienes de capital. Por otro lado, un ligero aumento caracterizó la producción de bienes de consumo y energía. Teniendo en cuenta la evolución económica del año pasado, solo se registró un aumento en el primer trimestre (neto de factores estacionales), mientras que en los siguientes trimestres se produjeron descensos continuos, con una disminución más marcada en los últimos tres meses del año. La dinámica tendencial del índice corregido de efectos de calendario también fue negativa durante casi todos los meses de 2019”.
Hablando delos sectores individuales, las variaciones negativas más significativas corresponden a bienes intermedios (-2,8%), energía y bienes de consumo (-2,5% para ambas agrupaciones) y bienes de equipo (-2,3%). Sobre una base de tendencia, la caída es aún más significativa: -6,6% para bienes intermedios, -6% para energía, 4,7% para bienes de equipo. Los bienes de consumo se ahorran parcialmente, marcando un -0,8%.
“Los únicos sectores de actividad económica que registran incrementos tendenciales -subraya el Instituto Nacional de Estadística- son la fabricación de productos informáticos, electrónicos y ópticos (+5,3%), la industria de alimentos, bebidas y tabaco (+2,9%) y otras industrias (+1,1%). Entre los restantes sectores, las mayores caídas se registraron en las industrias (-10,4%), en la fabricación de coque y productos refinados del petróleo (-9,3%) y en la fabricación de maquinaria y equipo ncop (-7,7%).
Destacan los datos relativos a los vehículos a motor, cuya producción en 2019 marca un descenso de dos dígitos: -13,9%, el peor resultado desde 2012. A diciembre, la tendencia de descenso es del 8,6%.
