Al Araba Al Madfuna es una gran exposición del artista Wael Shawky (Alejandría, Egipto, 1971) ganador de la primera edición del Premio Mario Merz.
El proyecto de exposición site-specific gira en torno a la trilogía cinematográfica Al Araba Al Madfuna, presentada por primera vez en su totalidad. Wael Shawky te invita a recorrer los elementos físicos que componen la película: arquitectura escénica y esculturas instaladas en un paisaje artificial de arena.
La escenografía así producida, junto con las proyecciones, ofrecen la posibilidad de una experiencia inmersiva entre el sueño y la realidad y crean una atmósfera original que incorpora las referencias históricas, literarias y cinematográficas con las que el artista ha imaginado sus historias.
Con Araba Al Madfuna Shawky continúa el interés, ya explorado en varios proyectos durante los últimos diez años, por utilizar cuentos e historias preexistentes que forman parte de nuestra cultura, como punto de partida para la investigación cinematográfica. Su obra se basa en relatos históricos, interpretaciones sociológicas y obras narrativas, a partir de las cuales construye su manera de mirar los mitos del pasado junto a las realidades del presente.
Las películas de Al Araba Al Madfuna se filmaron en el pueblo del mismo nombre envuelto en antiguos mitos y leyendas y ubicado cerca de las excavaciones de Osirion del Templo de Seti I, en la antigua ciudad de Abydos en Egipto. La trilogía reflexiona sobre los rituales de narración oral de la comunidad, donde las historias repetidas y transmitidas a lo largo del tiempo se convierten en historias legendarias que se vuelven a proponer como una nueva interpretación del cambio y el progreso.
Wael Shawky explora las posibilidades de interpretar la literatura, produciendo películas con un estilo teatral y cinematográfico moderno. Niños vestidos de adultos con la tradicional gallabiya, con turbante y bigote postizo, cuentan las parábolas de Dayrout al-Shareif (1983) del escritor egipcio Mohamed Mustagab. Su narración se combina con la puesta en escena de un hecho inspirado en el encuentro de Shawky con los lugareños que cavaban túneles bajo sus casas con la esperanza de encontrar tesoros escondidos, según los relatos que les transmitían sus antepasados. De manera similar, las parábolas de Mohamed Mustagab conectan perspectivas mitológicas del mundo metafísico, de lo invisible con el mundo material físico. Los relatos escritos en verso, en lengua árabe antigua, también retoman cuestiones de nuestra contemporaneidad, en una dualidad que también se refleja en la composición de las películas.
Al Araba Al Madfuna I (2012) se basa en el cuento de Mustagab, The JB-R's, que habla de una tribu llamada Al Jabarina. La historia se desarrolla a lo largo de muchos años, con los ancianos tribales alternos que comparten sus consejos sobre qué animal debería adoptar el pueblo (primero un burro, luego un camello y finalmente un cerdo) como ofrenda para un futuro de prosperidad.
Al Araba Al Madfuna II (2013) retoma dos cuentos, La ofrenda y Los jinetes adoran los perfumes. El primero habla de un pueblo que se ha vuelto misteriosamente mudo y obligado a revisar sus métodos comerciales, basados en principio en el poder del habla y el lenguaje hablado. En la última historia, una hermosa hechicera de sangre real, temida por sus súbditos, captura y se casa con una serie de caballeros desprevenidos que se encuentran con un destino fatídico.
Al Araba Al Madfuna III (2015-16) está inspirado en el cuento Sunflowers de Mustagab. En la historia, el girasol se convierte en una metáfora de la inventiva y el cambio, y de la capacidad de adoptar nuevas ideas. El pueblo le da un nuevo significado a una planta sin valor, la convierte en su principal producto, transformándola en un verdadero tesoro, reemplazando un simple producto agrícola por una planta que se presta a nuevas necesidades de entretenimiento.
A diferencia de las películas anteriores en blanco y negro, esta fue realizada en color e invertida en negativo, lo que subraya el enfoque conceptual de relacionar el universo real con el metafísico.
Wael Shawky es el ganador de la primera edición del Premio Mario Merz, un premio bienal internacional de arte y música. Fue elegido por un jurado compuesto por Manuel Borja-Villel, Massimiliano Gioni, Beatrice Merz, Lawrence Weiner junto con el voto del público. El anuncio se realizó el 6 de mayo de 2015 en Venecia con motivo de la inauguración de la exposición Mario Merz en la Gallerie dell'Accademia y la 56ª edición de la Bienal de Venecia.
Junto con la exposición en la Fundación Merz, se abre una retrospectiva del artista en el Castello di Rivoli, comisariada por Carolyn Christov-Bakargiev y Marcella Beccaria.
