Si los aficionados a la Fórmula 1 habían vivido un fin de semana de adrenalina altísima en Bakú, donde Hamilton y Vettel se batieron hasta con golpes incorrectos, el GP de Austria supuso una vuelta al aburrimiento.
La victoria fue para Valtteri Bottas, el finlandés de Mercedes contratado para apoyar al campeón defensor Lewis Hamilton, pero que ahora está a solo quince puntos del inglés en la clasificación mundial. La carrera fue bastante plana, excepto por el comienzo.
Bottas despega como un cohete y confirma la primera posición, Vettel le sigue y Ricciardo consigue adelantar a Raikkonen por detrás para acabar en tercera posición. Nada más llegar a la primera curva sale el piloto más esperado del fin de semana, el joven Verstappen seguido de miles de holandeses que han llegado al circuito de casa de Red Bull. El joven de diecisiete años se vio involucrado en un accidente con Alonso y Kvyat y fue inmediatamente excluido de la carrera junto con el veterano español.
Hamilton, que partía desde la cuarta fila debido a la sanción por el cambio de caja de cambios, inició inmediatamente su carrera hacia el rival alemán de Ferrari. En cabeza Bottas marca el ritmo, Vettel le sigue pero nunca se le acerca. Ricciardo logra mantener la tercera posición a pesar de los ataques frenéticos de Hamilton, que llega a menos de un segundo del australiano y conquista la cuarta posición.
Ahora Vettel lidera la clasificación mundial con 20 puntos sobre el inglés, Bottas tercero con 35 puntos.
