Un nuevo bono a diez años por valor de 5 millones de euros ha llegado esta mañana al Viejo Continente. Lo puso en marcha, según anunció el pasado viernes, el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, el fondo de rescate creado por la UE para ayudar a los países en crisis. La emisión debería garantizar un rendimiento de alrededor de 17 puntos básicos sobre la tasa midswap, en línea con el susurro de ayer de 16-18 pb. El acuerdo, que fue calificado con triple A por las tres agencias calificadoras, fue liderado por Barclays Capital, Deutsche Bank y HSBC. El nuevo bono es el primero en apoyar el programa de ayuda a Portugal.
Se prevén dos bonos más para la segunda mitad del año, con un objetivo de 3-5 mil millones para cada operación. El primero, nuevamente en apoyo de los portugueses, se espera para el 15 de julio. Tendrá un importe de 3 millones de euros y tendrá una duración de cinco años. La UE podría entonces completar la cobertura de sus necesidades de financiación con emisiones más pequeñas, tanto a través de préstamos sindicados como a través de operaciones específicas. El EFSF colocó el primer tramo de ayuda el pasado mes de enero, emitiendo un bono de 5 millones a cinco años para dar apoyo financiero a Irlanda. En aquella ocasión las solicitudes, procedentes de 500 inversores, ascendieron a más de 45 millones de euros.
