Trabajo, trabajo y más trabajo. Cada vez está más cerca la reanudación del campeonato, por lo que Juventus y Milan suben la intensidad. Tras la multitudinaria afluencia del miércoles, Antonio Conte ha vuelto a bloquear las puertas de Vinovo, señal de que algo se cuece. En Milanello, por otro lado, no hay miradas indiscretas ni fanáticos que vitoreen, por lo que Allegri puede trabajar en absoluta tranquilidad. El jueves de los duelistas dio luego las palabras de Leonardo Bonucci y Maxi López, dos que quizás no sean jugadores de primer nivel, pero tienen hambre de victorias y del Scudetto. Todo ello sin olvidar a Piermario Morosini, a cuyo funeral asistieron, entre muchos otros, Giuseppe Marotta y Ariedo Braida.
AQUÍ JUVE
Día de táctica en el Juventus Center, por lo tanto puertas rigurosamente enrejadas y aficionados (esos pocos que desafiaron el viento y la lluvia) fuera de las puertas. Pese al halo de misterio que acompañó al entrenamiento, algo salió a la luz del "laboratorio de Antonio Conte". El técnico, siempre muy flexible tácticamente hablando, parece orientado a desafiar a la Roma con un 4-3-3, que es el sistema de juego de los giallorossi. Sin embargo, no hay certezas, también porque Conte nos tiene acostumbrados a las sorpresas, pero tras 32 partidos de Liga hemos aprendido una cosa: el técnico de la Juventus estudia a fondo a su rival y moldea a su equipo en consecuencia. Ciertamente no le falta libertad de elección: ante la Roma tendrá a toda la plantilla a su disposición, incluido Bonucci, que jugará con mascarilla protectora tras la operación de la nariz. Por cierto, ayer el defensa de la Juventus publicó unas declaraciones en su web oficial: “Volver a jugar después de 15 días no es fácil, sobre todo ante la Roma. En mi opinión, lo más importante será tener el enfoque correcto para este partido: hay que jugar como contra la Lazio y ser más cínico. Este es el partido más importante de aquí al final, es como una final. ¡Depende de nosotros!”. Bonucci luego cerró su mensaje con un pensamiento para Zlatan Ibrahimovic: “¿Dice que quiere el Scudetto? Mamma mia, ¡lo queremos en cubos! Vamos Juve, vamos Juventus Stadium”. Que una vez más se agotará (¡las entradas restantes se pulverizaron en 40 minutos!), pero ¿dónde está la noticia?
AQUÍ MILÁN
A diferencia de la Juve, el Milan ha decidido dedicar su jueves al trabajo deportivo, único aspecto en el que los bianconeri han demostrado superioridad efectiva. Quizá por eso Massimiliano Allegri ha optado por aprovechar este parón obligado para echarle leña a las piernas, de cara al tour de force de las próximas 15 jornadas. Tras una fase inicial de calentamiento, los rossoneri llevaron a cabo una sesión de trabajo predominantemente atlética en el campo exterior, divididos en varios grupos. Ignazio Abate y Mark Van Bommel también realizaron todo el trabajo regularmente con sus compañeros, que seguramente jugarán el domingo. En el campo central, en cambio, Kevin Prince Boateng, Alexandre Pato, Thiago Silva, Massimo Ambrosini y Gennaro Gattuso trabajaron por separado, realizando una sesión de alta intensidad. También hay que señalar que Allegri probó el tridente Cassano - Ibrahimovic - Robinho, pero de momento aún es pronto para pensar en volver a ver a Fantantonio desde el primer minuto. Tras el entrenamiento, los jugadores volvieron a sus casas, excepto Maxi López, que se dirigió a los estudios de Milan Channel. El argentino, protagonista de una negociación de mercado muy singular (tanto que reveló que se sentía como Tom Hanks en "La terminal"), aprovechó para opinar sobre la lucha por el título: "No podemos dar nada, esta semana hemos podido entrenar bien. La del domingo es la primera de seis finales, tenemos que ganarlas todas". Pocas palabras, pero llenas de valor. El que servirá para intentar el asalto al Scudetto.
