Air Italy presentó una oferta formal por la aerolínea Livingston, especializada en vuelos chárter y declarada insolvente en octubre de 2010, cuando fue puesta a la venta por el comisario Daniele Discepolo. La compra de Livingston reforzaría así el negocio de vuelos chárter de la nuevo polo creado por Meridiana Fly y Air Italy. La propuesta de compra va acompañada de un depósito de 200 mil euros. La oferta está condicionada a un acuerdo con los sindicatos sobre el empleo, según el cual Air Italy absorbería a casi un centenar de empleados, de los más de 400 despedidos.
El Rt de Riccardo Toto, hijo del fundador de Air One y accionista de Alitalia-Cai, Carlo Toto, sigue interesado en la aerolínea chárter. Sin embargo, una posible propuesta de compra por parte del joven empresario prevería la fuerte oposición del director general de Cai-Alitalia Rocco Sabelli, según quien la compra de Livingston violaría el compromiso de no competencia hasta finales de 2013 suscrito por Toto Spa con la venta de Air One a Cai. El pacto de no competencia se refiere a “la actividad regular de transporte aéreo de pasajeros que entra en competencia directa con la actividad desarrollada por Cai”. Pero Livingston es una aerolínea chárter, no programada.
