Maurizio Lupi, coordinador nacional de Noi con l'Italia, parlamentario saliente, es candidato a la Cámara de Diputados de Lombardía por la coalición de centro-derecha en la circunscripción uninominal de Merate (Brianza). También es candidato en los distritos electorales plurinominales de Milán, Provincia de Milán, Monza y Bérgamo.
Mi primera propuesta, si Noi con l'Italia-UDC es mayoritaria, es crear el Ministerio de la Familia. No una delegación a un subsecretario o un ministro que ya tiene otras delegaciones, un ministro que solo se ocupa de la familia con una cartera propia. Que así se siente en el Consejo de Ministros, que se convierta en el punto de referencia de todas las asociaciones familiares que actúan en la sociedad.
Al decidir y asignar poderes, un gobierno indica sus prioridades. Creo que junto con la educación y el trabajo, la familia, y la urgencia demográfica asociada a ella, deben volver a colocarse en el centro de nuestras políticas.
En consecuencia, mi primera propuesta será una ley única dedicada a la familia: una Ley de Familia.
Así como en 2017 finalmente conseguimos, gracias a la insistencia de mi partido, dedicar un capítulo de la Ley de Presupuestos del Estado expresamente a la familia (era la primera vez desde la instauración de la República), financiándolo con 600 millones de euros, se necesita lo mismo a nivel legislativo. No más disposiciones únicas dispersas en los diversos decretos, sino una política orgánica reunida en una sola ley.
La política orgánica para la familia significa abarcar todos los temas que le conciernen. Desde los incentivos directos, pasando por el sistema de bienestar hasta la relación con el mundo del trabajo.
Entonces, detallando analíticamente:
– Introducción del “factor familia”, por el que las deducciones por hijos crecen proporcionalmente al número de hijos (desde los 950 actuales a 1.150 por el primer hijo, hasta los 8.400 euros por familias con 4 hijos). No cuesta mucho, 4 mil millones contra los más de 20 de la renta del ciudadano. Salvo que mientras este último es un gasto asistencial disponible, el factor familiar es una inversión de futuro.
– Deducción adicional de 500 euros (a los 750 ya previstos) por cada progenitor mayor a cargo.
– Estabilización del bono bebé, el bono madre primeriza y el bono jardín de infancia. El ejemplo de Francia, que ha comenzado a revertir los datos de natalidad, nos enseña que las bonificaciones funcionan si son reglas estables en el tiempo, no si son puntuales.
– Deducción de las tasas de escuelas infantiles y centros de atención diurna y de los gastos de personas mayores a su cargo hospitalizadas por enfermedades graves en residencias privadas.
– Revisión del ISEE con la exclusión de la primera casa como indicador de riqueza. Quienes están pagando una hipoteca ya no son ricos, no pueden ir de compras con la casa en la cartera, pero muchas veces quedan excluidos de algunos servicios sociales gratuitos o subvencionados precisamente por el hecho de ser propietarios de la casa.
– Conciliación de tiempos familia-trabajo: crédito fiscal equivalente al 20% del salario reconocido al empleador por cada día de ausencia de los nuevos padres.
– Subsidio parental: incremento del 30 al 60% del salario por períodos de permiso parental hasta el sexto año de vida del hijo.
– Microcréditos a tipos subvencionados (según el modelo de las pequeñas empresas) para familias en dificultad para determinados y específicos gastos imprescindibles para la vida de la unidad familiar.
– Refuerzo del fondo de garantía de préstamos para la primera vivienda de parejas jóvenes. El trabajo de los jóvenes es cada vez más a plazo fijo, y esto no es suficiente para los bancos, el fondo solucionaría esta dificultad.
– Incremento de los recursos del Fondo Nacional para el No Autoabastecimiento y búsqueda de los recursos adecuados para permitir el funcionamiento de la ley “Después de nosotros”. Creación de un maestro de datos de la discapacidad.
Todo esto es sólo la forma en que la sociedad devuelve a las familias lo que estas les dan: saldo del sistema de pensiones, consumo, atención a las personas mayores. Sobre todo, permiten que exista un futuro.
