Pop y surrealismo en la obra de Alessandro Calizza

Alejandro Calizza, nacido en 1983, es uno de los artistas más influyentes en la escena del arte contemporáneo romano: desde 2012 ha sido capaz de asombrar a grandes audiencias y críticos organiza veladas de arte, exposiciones personales y actuaciones tanto en Italia como en el extranjero. Ya se trate de antiguas estatuas griegas en “licuefacción” o de edificios infestados de enredaderas fluorescentes, su obra se mueve entre códigos netamente pop y atmósferas de gusto surrealista, imbuidas de una delicada reflexión artístico-sociológica.

El artista hace una reflexión crítica a través de su investigación artística, en torno al tema de la crisis de identidad en la sociedad posmoderna, una crisis que involucra al arte de manera sensible, y cuestionando su propia razón de ser se generan varias interrogantes. Este proceso implica obviamente la sensibilidad artística de Calizza, quien, año tras año, se centra en el peligro de la progresiva degeneración y degradación del arte, que metafóricamente se asemeja a nuestra sociedad.

Aquí llega la entrevista concedida por el artista romano a PRIMER arte.

Calizza, comencemos inmediatamente con una gran pregunta: ¿qué significa para ti hacer arte?

“Esa es realmente una gran pregunta. Creo que solo tengo dos formas de responder: un flujo de conciencia de mil páginas o un par de aforismos que he escrito hace algún tiempo para intentar darme una respuesta a este asunto. Me quedo con la segunda opción.

Hacer arte significa expresando mi mundo interior. Dejar todo eso dentro de mí es demasiado. Tiene que salir. Hacer arte es hacer política. Esa política que no ha renunciado a la Belleza”.

Ahora tengo para ti una pregunta más trivial, ¿cuándo y por qué empezaste a hacer arte?

“No puedo decir. Podríamos tener en cuenta muchos comienzos: el primer dibujo, el primer graffiti en 1996, los primeros lienzos donde intentaba plasmar una idea, la primera exposición y comparación con el Mundo del Arte que me era totalmente desconocido…
Siempre me sentí "fuera de lugar", como si estuviera tratando de caminar por caminos que no me convenían, a veces incluso hermosos caminos, pero en los que después de un tiempo era fácil para mí perder todo interés.

En cambio, cuando trabajo en mi estudio, siento que todo resuena de la manera correcta. Casi no percibo la barrera física que me separa de la obra de arte que estoy creando o de cualquier otra cosa. Es en esos momentos que siento que tengo "mi lugar" en el orden de las cosas. No sé cuándo empezó, aunque lo cierto es que me di cuenta de que No podía imaginarme de ningún Plan B."

¿Crees que se necesita más arte en Roma e Italia en el siglo XXI?

“Es una situación compleja, también en relación a las muchas nuevas posibilidades con las que cada uno puede transmitir su trabajo. Como en cualquier otro ámbito, la globalización e internet han dado a cada uno la oportunidad de decirse y definirse como quiera. Hoy, más que nunca, un excelente trabajo de relaciones públicas es suficiente para ser denominado el Futuro (efímero) del arte italiano. Creo que hay demasiadas exposiciones repletas de “obras de arte”, pero no sé cuántas de ellas son realmente arte, al menos según mi idea personal del arte. Hoy en día están muy de moda esos trabajos decorativos que no encarnes ningún tipo de crítica y no te hagas reflexionar sobre nada.

El arte, el verdadero, se comporta como un espejo (tanto desde el punto de vista social como personal) y muchos no tienen ganas ni valor para mirarse a los ojos. Enfrentar la locura de esta era requiere mucha energía y casi nadie tiene la fuerza para hacerlo, mejor fingir que no pasó nada y distraernos frente a un hermoso lienzo inútil. Hay tantos artistas talentosos, afortunadamente, pero por un lado hay un sistema en sí que no favorece a los talentosos y por otro lado hay una actitud nociva de dura competitividad entre los propios artistas, estos dos factores hacen un enfrentamiento estimulante. entre la gente del mundo del arte muy difícil de poner en marcha. Entonces, para resumir, sí, creo que se necesita mucho más arte y menos cosas decorativas para la casa de los ricos”.

¿Cómo sueles obtener Inspiración?

“Todo puede ser de inspiración, depende del estado de conciencia en el que nos encontremos y de cómo expresemos nuestra realidad. Mi impulso por crear una obra de arte nace de la urgencia de contar algo, incluso si no hay nadie que esté dispuesto a escuchar. Siento la urgencia de contar y plasmar dinámicas en las que estamos inmersos a diario pero que muchas veces son difíciles de definir, sobre todo cuando vivimos el día a día sin la posibilidad de detenernos y darnos cuenta de lo que está pasando. Es como estar en una cinta de correr que va a máxima velocidad, no hay tiempo para preguntar o mirar alrededor, solo hay que correr sin cuestionar nada o estás jodido.

El arte significa tomarse el tiempo para detener nuestra carrera diaria sin sentido y reflexionar sobre nuestras vidas. Lo que quiero comunicar es mi visión de las cosas; mi preocupación por la dirección que parece haber tomado nuestra época. Necesitamos volver a vivir la realidad con más conciencia. Creemos que vivimos en un sistema inmutable, por lo que todo es inmutable y debe aceptarse sin discusión, mal, todo permanece en un equilibrio muy precario, se necesitaría muy poco para que todo se derrumbe y luego tal vez tratar de reconstruirlo de otra manera. ”

Después de varias residencias de artistas, una audaz actuación colectiva en Maxxi, grabados antiguos retocados con acuarelas, restaurar esculturas con cola dorada, organizar noches de arte en Roma, crear escenografías para videos musicales y compañías de teatro y haber participado en proyectos de remodelación artística de la ciudad… qué proyectos tienes para el futuro?

“Cierto, ha sido un período lleno de satisfacción artística. Acabo de regresar de Nueva York donde tuve mi “Exhibición Stoned” (Es solo un juego de palabras divertido) perteneciente al “Proyecto Otro Lugar” – Nuevos Paisajes Mentales diseñado por Contesta Rock Hair. Una experiencia verdaderamente positiva. También alquilé recientemente un segundo estudio de arte, aún en San Lorenzo, cerca de mi primer estudio/casa; Lo comparto con Lulù Nuti, una talentosa artista que vive y trabaja entre París y Roma.

La cita más importante seguramente será mi próxima exposición individual en un museo notorio que amo mucho.; después de la del Museo de Arte Clásico de Roma, me emociona poder hacer esta exposición, será una forma perfecta de profundizar y completar el discurso sobre identidad y sociedad que vengo persiguiendo en mis obras desde hace años . Por el momento, sin embargo, no puedo decir nada más, ¡simplemente porque todavía estamos definiendo los detalles del proyecto y soy un poco supersticioso!

Ya que algunos títulos de sus exposiciones pasadas no son tan tranquilizadores, por ejemplo recuerdo: “Carne Fresca”, “Advertencia Global”, “¡Oh Hoja!” y “Athens Burns”, ¿qué futuro deseas para el Arte en general y para nuestra sociedad contemporánea?

“Diré que no debemos preocuparnos tanto porque el arte siempre encontró la manera de sobrevivir a lo largo de los siglos. Muy diferente es el discurso sobre nuestra sociedad. Encuentro preocupante el nivel de degradación cultural y deshumanización al que hemos sido llevados en las últimas décadas. La mayoría de las personas están frustradas e infelices, viven sus vidas sin sentido como si tuvieran otras miles de vidas para gastar..

Incluso aquí mi respuesta podría ser muy larga. Creo que hace falta una nueva conciencia, redescubrirnos como una sola humanidad, que debe cuidarse a sí misma en lugar de ir hacia la autodestrucción. En este sentido, el arte realmente puede hacer mucho: la política determina la vida de las personas, pero también son las personas las que pueden cambiar la política y quienes deciden por ella; este cambio solo puede pasar por crecer día a día como individuos gracias a la Cultura y la elección de ser parte activa de este proceso.”

Escrito y traducido por Gerardo Iannacci