Las reacciones de la Asociación Nacional de Magistrados fueron muy duras que habla de "venganza e intimidación de jueces, de norma inconstitucional y de monstruosidad jurídica", sugiriendo que los magistrados podrían anunciar próximamente una huelga. Mientras tanto, Di Pietro, por la Italia de los valores, está enojado no solo con el centroderecha, sino también con los 50 "traidores" que permitieron el bombardeo parlamentario. La referencia es a los francotiradores de la Fli, Udc y Pd. Por su parte, el líder del Partido Democrático Bersani habla de un "gesto de total irresponsabilidad", denunciando "el resurgimiento de viejas mayorías", cuando se trata de justicia o Rai. En efecto, en los últimos días, la junta directiva de la Rai ha señalado a los directores de Tg1 y Tg autonómicos, sobre la base de una ínfima mayoría de los directores designados por el Pdl y la Lega. El líder del grupo del partido de Berlusconi, Fabrizio Cicchitto, niega que hable de "voto libre en las aulas", refiriéndose a una convergencia que, como también observó Di Pietro, va más allá de la Liga y el PDL.
En este punto, el Gobierno ha esperado una corrección de la enmienda por parte del Senado y también el líder del tercer polo Pierferdinando Casini cree que la ley, en este punto, necesita ser revisada. Lo cierto es que la justicia es un nervio en carne viva en la política, que corre el riesgo, incluso en futuras ocasiones, de poner en peligro a la mayoría que apoya al Gobierno. En los próximos días el juicio de Mills podría llegar a su conclusión (aunque solo en primera instancia y luego prescribir) y muchos miembros del PDL ya han anunciado que una posible condena a Silvio Berlusconi no quedará sin consecuencias políticas.
En resumen, a pesar de la marcada disminución del diferencial y del inicio de discusiones con los sindicatos y Confindustria sobre los costos laborales, Dificultades para el Ejecutivo podrían derivar del frente interno de la política: la cuestión de la justicia, por no hablar de los escándalos muy recientes, vinculados a los reembolsos electorales a los partidos, que, como los radicales vienen denunciando desde hace tiempo, y el caso Lusi ha puesto de manifiesto, constituyen una verdadera financiación pública en contradicción con el resultado de un referéndum aprobado con una amplia mayoría. No es casualidad que ayer Bersani y Casini propusieran poner de inmediato en sus manos una ley de partidos, que según el líder del tercer polo podría aprobarse en muy poco tiempo.