comparte

Eurocopa 2016: Italia-España, dentro o fuera

Los Azzurri de Conte se enfrentarán a los campeones defensores esta noche en los octavos de final: en el papel comienzan como perdedores pero intentarán la hazaña – Conte: “Necesitarás algo extraordinario para ganar. Queremos jugarlo sin remordimientos. No tenemos ganas de irnos a casa” – Florenzi en lugar de Candreva – El exjugador de la Juventus Morata liderará el ataque de las Furias Rojas

Eurocopa 2016: Italia-España, dentro o fuera

La caza de la empresa. Italia llega al primer "dentro o fuera" de su campeonato europeo en presencia del equipo vigente campeón, España que, en 2012, se llevó la copa justo contra nosotros. En comparación con hace 4 años, muchas cosas han cambiado, pero no la jerarquía inicial: hoy como entonces, de hecho, son las Furias Rojas las que juegan como favoritas.

“Si usamos la razón que perdemos, tenemos que ir más allá y sacar todo lo que tenemos – el pensamiento de Antonio Conte. – Se necesitará algo extraordinario para lograr la hazaña, es un juego sin mañana. Tenemos un gran respeto por España pero nos hemos preparado, queremos jugarla sin remordimientos ni recriminaciones. Los chicos y yo no tenemos ganas de volver a casa”.

El riesgo es realmente alto, aunque hay que decir que incluso nuestros adversarios hubieran preferido evitarnos. De hecho, la octava más sugerente de las vistas hasta ahora tendrá lugar en Saint Denis, tanto que, si todo no fuera tan malditamente serio, uno sonreiría al pensar que Bélgica, derrotada en el partido directo hace unos días y se clasificó detrás de nosotros, eliminó a Hungría y encontrará a Gales en cuartos de final.

Un marcador mucho más afortunado que el nuestro, más parecido a una ruleta rusa (los que jueguen esta noche encuentran a Alemania campeona del mundo) que a una Eurocopa de fútbol, ​​pero ya está, así que de nada sirve quejarse: lo único seguro es que una de Italia y España será obligado a empacar.

“Tenemos mucho respeto por los Azzurri, somos equipos del mismo nivel y no hay favoritos – pensó Vicente Del Bosque. – No tiene sentido hacer comparaciones con 2012, esa es otra historia. No veo grandes diferencias en la condición física o el juego, habrá que prestar mucha atención".

Sin embargo, está claro que, al menos sobre el papel, España parte con todos los favores de la previsión. El ritmo técnico está muy de su lado e incluso la experiencia de gente que está acostumbrada a jugar en el Barcelona o el Real Madrid no se puede comparar con la nuestra. Conte intentará jugarlo con el fútbol intenso y organizado de siempre, con la esperanza de que, en el momento adecuado, los pies sean capaces de hacer lo que pide el cerebro.

Desgraciadamente, el técnico tendrá que prescindir de Candreva, uno de los hombres más en forma y potencialmente peligroso de la España de Del Bosque, muy bueno en el manejo del balón pero un poco distraído en la fase defensiva. En su lugar estará Florenzi, en el tercer rol diferente en 4 partidos disputados. Por lo demás, el 3-5-2 azul está básicamente decidido: Buffon en la portería, Barzagli, Bonucci y Chiellini en defensa, Parolo, De Rossi, Giaccarini y De Sciglio (favorito sobre Darmian) en el centro del campo, Eder y Pellé en ataque.

Sin dudas en cambio para Del Bosque, dispuesto a confirmar el habitual 4-3-3 con De Gea en la portería, Juanfran, Sergio Ramos, Piqué y Jordi Alba en la zaga, Fábregas, Busquets e Iniesta en el centro del campo, David Silva, Morata y Nolito en el tridente ofensivo.

Además de los campeones de España, nuestros jugadores tendrán que estar atentos a las cartas: hay 10 Azzurri que jugarán con la espada de Damocles del Aviso. Van desde los defensas (Buffon, Barzagli, Bonucci y Chiellini) hasta los centrocampistas (De Rossi y Thiago Motta), pasando por los delanteros (Eder, Zaza e Insigne) hasta el portero suplente (Sirigu). Grandes nombres, que de ser descalificados pesarían mucho en el eventual cuarto contra Alemania. Sin embargo, solo pensaremos en esto al final de la tarde: primero tenemos que vencer a la armada española, una misión que, de tener éxito, entraría por derecho propio en la historia de nuestro fútbol.

Revisión