comparte

Residuos y vertederos: Sicilia intenta cambiar

Hallados recursos regionales para cerrar tres vertederos - Solo el 40% de la recogida selectiva en toda la isla - Se ha iniciado una investigación de la Comisión Antimafia

Residuos y vertederos: Sicilia intenta cambiar

Deshazte de un legado: sal del grupo de Regiones que mantienen vivos los vertederos y quita cualquier sospecha sobre la gestión. Un camino cuesta arriba que solo se puede recorrer con éxito si se tiene el dinero. La región de Sicilia, donde los costos de gestión de basura se encuentran entre los más altos de Italia, ha anunciado que ha encontrado 2,2 millones de euros para cerrar sitios antiguos. de Mazzarrà Sant'Andrea, cerca de Messina, Camporeale y Bolognetta, en la provincia de Palermo. Un anuncio positivo, con el Presidente Nello Musumeci y el Concejal de Energía y Servicios Públicos, Alberto Pierobon, explicando que han encontrado recursos en el Fondo Regional alimentado por impuestos especiales precisamente para los residuos en rellenos sanitarios.

Para no exponerse a más críticas, con la Comisión Antimafia ya en funcionamiento desde hace unas semanas, la junta de Musumeci ha firmado un acuerdo con el Ingv, el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, y el Departamento de Ingeniería Civil de Sapienza para poner vertederos de forma segura. En los días en que los ecologistas volvían a protestar por los retrasos crónicos y el lento avance de la separación de residuos, se completó el censo de vertederos y zonas de riesgo en toda Sicilia: Se identificaron 511 sitios que también requirieron la colaboración de técnicos municipales de 250 municipios. Un trabajo sobre el territorio del que surgió -explican en Palermo- que antes de iniciar la planificación de las recuperaciones se deben realizar en poco tiempo algunas intervenciones urgentes para remover los peligros para la salud.

Los residuos sicilianos que van a los vertederos siguen siendo más del 70%, con un enorme desperdicio de recursos públicos y empresas privadas para gestionar. Periódicamente las asociaciones ecologistas vuelven a llamar la Región sobre la necesidad de impulsar la recogida diferenciada de residuos y planificar modernas plantas de tratamiento. En otras palabras, no ven nada que sugiera un sistema circular de gestión de residuos, particularmente de residuos húmedos, con valorización energética. Parece que la orientación de la Región es delegar en las empresas privadas que gestionan los sitios la decisión de construir o no las plantas. Una vía virtuosa, controlada, capaz de producir energía para familias y empresas y rentas para las arcas públicas no parece interesar.

En nueve meses, la Unión Europea pedirá a las Regiones que apliquen la normativa comunitaria sobre el tratamiento de todo tipo de residuos. El paquete de economía circular no contempla excepciones e incluso una Región que quiera deshacerse de un pesado legado técnico, ambiental y político tendrá que hacer más. Si es cierto que la recogida selectiva roza ya el 40%, quizás sea necesario reflexionar más adecuadamente sobre el plan autonómico de residuos. Compartir las mejores soluciones con las administraciones de la ciudad, las asociaciones y el mundo laboral para no ser multado y quedarse fuera de cualquier recompensa. Los 2,2 millones que se encuentran en el presupuesto autonómico estos días son una buena señal. En los sitios de sellado se hace más respirable el aire, pero no se garantiza el avance que la Región dice querer lograr y que, entre otras cosas, también debe convencer a una comisión investigadora.

Revisión