Buenos resultados para Parmalat en el primer semestre de 2012. Las ventas netas ascendieron a 2.276,9 millones de euros, un incremento de 130,0 millones (+6,1%) frente a los 2.146,9 millones del primer semestre de 2011. Este incremento se debe principalmente tanto al incremento de los precios de venta fijado el año anterior en los principales países, como a mayores volúmenes de ventas registrados en Australia, Rusia y África.
El EBITDA asciende a 163,3 millones de euros, un aumento de 14,1 millones (+9,4%) frente a los 149,3 millones del primer semestre de 2011. Este aumento también se debe a una contención de estructura.
El beneficio neto de explotación asciende a 96,2 millones de euros y está en línea con los 96,6 millones del primer semestre de 2011. La mejora en la gestión industrial, es decir, en el margen bruto de explotación (+14 millones), se ve compensada por una menor aportación de la gestión no recurrente que en el primer semestre de 2011 había producido otros ingresos por encima de los 14 millones de euros.
Las amortizaciones y saneamientos de inmovilizado ascienden a 56,5 millones (59,9 millones en el primer semestre de 2011). El beneficio del grupo asciende a 82,5 millones de euros, un aumento de 6,0 millones frente a los 76,5 millones del primer semestre de 2011. Este incremento es atribuible sustancialmente a la mejora en la gestión industrial, la menor aportación de los ingresos no recurrentes y mayores ingresos financieros sobre los liquidez.
El efectivo neto y equivalentes al efectivo ascienden a 1.578,0 millones, con un aumento de 59,6 millones, frente a los 1.518,4 millones a 31 de diciembre de 2011. Las principales causas de esta variación son: la generación de efectivo de las actividades operativas y financieras, respectivamente por 86,1 millones y 8,6 millones, parcialmente compensado por el pago parcial de dividendos por 33,6 millones.
