Ya no son los tiempos en que una crisis política abrumó la bolsa de valores porque le correspondía a la autoridad política interna influir en las tasas de interés y porque la cartera de gastos del gobierno era rica, pero fue suficiente para que la temperatura política subiera para que Piazza Affari presentar el cuento.
Al final de la mañana de un día todavía pobre en cotización y huérfano de la City que hoy está cerrada, Piazza Affari es la peor bolsa de Europa y logra perder alrededor de un 2%, a pesar de que el diferencial Btp-Bund se mantiene estable en torno a 240 puntos básicos.
Casi todos los bancos (Mps y Bper in primis) bajan con fuerza, pero también Mediaset, que es el peor valor de la lista y que confirma las preocupaciones de la familia Berlusconi sobre la línea dura elegida por el rey Silvio al menos hasta ayer.
Cabe señalar que las otras bolsas de valores europeas también están en su mayoría a la baja, aunque en mucha menor medida que Milán y que después del repunte de verano, es natural que los inversores moneticen sus ganancias.
Sin embargo, las subastas del Tesoro previstas para la semana no parecen dar motivo de preocupación.