El caldero incluye tatuajes y bebidas vegetales, shorts de hombre y leggins de niña, paños atrapapolvo y la bombilla LED, además de servicios integrados de telecomunicaciones (TV, Internet y voz) y alojamiento universitario. Con la habitual mayúscula científica y ese vago chirrido entre el lenguaje técnico y la realidad cotidiana, llega de nuevo este año la actualización de la cesta Istat, la lista de productos cuyos precios se utilizan para calcular la inflación.
La operación “tiene en cuenta las novedades surgidas en los hábitos de consumo de los hogares -explica Istat- y enriquece, en algunos casos, la oferta de productos que representan un consumo consolidado”. Por eso, por ejemplo, salió de la cesta el producto Couchette y coche cama.
En cambio, en cuanto a la encuesta de precios de los coches usados, "complementa la de los precios de los coches nuevos". Otra novedad es el Taladro eléctrico, que enriquece la gama de productos en el segmento de consumo Herramientas y equipos eléctricos para el hogar y el jardín.
En total, la cesta de este año se compone de más de 1.400 productos agrupados en más de 900 categorías. La actualización se produce periódicamente, pero en 2016 la revisión también refleja la introducción de la nueva clasificación de bienes y servicios destinados al consumo ECOICOP (Clasificación Europea de Consumo Individual por Finalidad).
Al igual que en 2015, 80 capitales de provincia contribuyen a la estimación de inflación con referencia a la canasta completa. En cuanto a la población provincial, la cobertura de la encuesta es del 83,5%. Otros 16 municipios -cuatro más que en 2015- contribuyen a la estimación de inflación de un subconjunto de productos (tarifas locales, algunos servicios y combustibles), cuyo peso en la canasta NIC es de 8,9%. Para estos productos, la cobertura de la encuesta, en términos de población provincial, es del 92,4%.
En la nueva cesta ha aumentado el peso de los bienes (del 53,55% al 53,72%) en detrimento de los servicios (del 46,45% al 46,28%), principalmente por la mayor importancia de los bienes duraderos y Alimentos No Elaborados y el descenso de los Servicios de transporte. Sin embargo, considerando las divisiones de gasto, los aumentos de peso más sustanciales corresponden a los servicios de hostelería y restauración y otros bienes y servicios. Los descensos más significativos, por el contrario, corresponden a la división de Transporte seguida de Muebles, artículos y servicios para el hogar.
