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Los minibots: un truco de pesadilla

La extraña idea de la Liga Norte Borghi de usar bots en pequeñas denominaciones como medio de pago y convertirlos en casi una segunda moneda en lugar del euro debilita aún más la credibilidad de Italia y podría crear serios problemas en los mercados.

Los minibots: un truco de pesadilla

El peor momento no podría haber sido elegido para hacer una vez más perder la cara ante la UE al gobierno amarillo-verde, que siempre olvida que en temas de política económica valen más los anuncios que los hechos para influir en las expectativas de los operadores económicos nacionales e internacionales. 

Y así, con motivo de la esperada respuesta de la Comisión Europea a la carta del ministro Tria sobre las medidas a adoptar para controlar la dinámica de nuestra deuda pública, el léxico del Gobierno que ya ha eliminado la gramática, la sintaxis, la declinación compleja de los verbos, la geometría de los ángulos, se prepara ahora para distorsionar el significado de un acrónimo universalmente conocido y apreciado: BOT, Letra del Tesoro. Como es sabido, representa la unidad de medida de un contrato que el Fisco celebra con el propio suscriptor del BOT, comprometiéndose a devolver el principal al vencimiento y a pagar los intereses a un tipo fijo o variable según el contrato. Como es bien sabido, el BOT en papel ya no existe desde hace un tiempo, habiendo sido desmaterializado y reducido a anotaciones contables en las carteras de los suscriptores. 

Estas simples cláusulas contractuales y prácticas contables son ignoradas por el presidente, en nombre de la Liga, de la Comisión de Presupuesto de la Cámara Claudio Borghi, ex profesor contratado en la Universidad y máximo exponente del movimiento Italexit, a pesar del aterrador y grotesco ejemplo del Brexit. De hecho, el presidente Borghi propone al Tesoro italiano emitir BOT con denominaciones tan pequeñas (los famosos minibots) que también pueden usarse como medio de pago para los intercambios más pequeños. Una segunda cuasi-moneda, lista –en los sueños del presidente Borghi– para reemplazar al tan odiado euro y la estabilidad financiera y monetaria subyacente. 

Si las resoluciones del presidente Borghi se hacen realidad Italia tendría una cuasimoneda con todas las características de los BOT: reembolsos al vencimiento, emisión con procedimientos de subasta competitiva, pago de intereses, ausencia de circulación de papel y efectivo. Y así los mercados financieros podrían votar y especular directamente y en cualquier momento sobre el valor de la nueva cuasi-moneda italiana frente a otras monedas sin tener que recurrir a valoraciones costosas e inciertas del riesgo de impago de la deuda soberana italiana a la que todos los Los mini BOT emitidos pertenecen por defecto.  

Tras las propuestas de oro a la patria y la declaración de haber abolido un hecho (la pobreza) e el truco del BOT cuasi-moneda de Borghi, todavía hay quienes acusan a la UE de considerar al gobierno amarillo-verde como un invitado a ser apartado de las conversaciones necesarias para la formación de nuevos órganos de gobierno de la UE.  

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