Emanuel Macron y Marine Le Pen acudirán a la papeleta para la elección del nuevo presidente de la República Francesa que, según las primeras proyecciones, están claramente por delante del gaullista Fillon de derecha gaullista y de Melenchon de extrema izquierda que no llegar al 20%. Macron está por delante de todos con más del 23 % de los votos, mientras que Le Pen ocupa el segundo lugar con poco menos del 22 %.
Macron tiene más posibilidades de ganar en las votaciones porque puede atraer el apoyo tanto de la derecha como de la izquierda, mientras que Le Pen, que obtuvo menos votos que en las últimas regionales donde alcanzó el 27%, es incapaz de forjar nuevas alianzas y por lo tanto difícilmente puede recoger más votos que hoy.
Inmediatamente después de la primera vuelta, tanto el gaullista Fillon como el socialista Hamon felicitaron a Macron y llamaron a sus partidos a votar por él en la segunda vuelta. Aprecio por Macron también del presidente socialista saliente Hollande.
En cualquier caso, si se confirman las primeras proyecciones, la avalancha lepenista no existe, los partidos tradicionales (republicanos y socialistas) emergen con los huesos rotos y el liberal-progresista Macron se erige como el hombre nuevo de Francia con efectos benéficos para todos. Europa y en cierto sentido también en Italia por la derrota de las posiciones populistas y extremistas.
Es muy probable que mañana los mercados financieros celebren el escape por los pelos del peligro del pene.