Luz verde para la destitución de Dilma Russeff, la presidenta de Brasil suspendida de sus funciones en mayo pasado: es el resultado de la votación de ayer en el Senado que se expresó con amplia mayoría en contra de Dilma.
El expresidente, si bien no es investigado por la justicia, está acusado de prácticas contables ilegales, que ha tratado de refutar sin éxito.
El pronunciamiento final del Parlamento brasileño sobre Dilma Russeff está previsto para el 25 o 26 de agosto.