Lo peor causado por el Covid parece haber pasado y con un poco de alivio se retoma algo que ya empezó. Desde ayer, 16 hectáreas de terreno baldío están a disposición de los jóvenes que quieran montar fincas.
Teresa Bellanova había comenzado, en el Ministerio de Agricultura, y continuó con Stefano Patuanelli. Hasta el 7 de septiembre en el sitio web http://www.ismea.it/banca-delle-terre es posible consultar las modalidades de participación, las características del terreno y enviar manifestaciones de interés.
Estamos en la cuarta licitación con un potencial de 624 nuevas fincas. Ismea y el Ministerio de Políticas Agrarias continúan, por tanto, acercando a los jóvenes al trabajo agrícola. La iniciativa arrancó cuando no había dramas provocados por la pandemia y las proyecciones de inversión y recuperación del Fondo Europeo de Recuperación. Por lo tanto, el valor de esta nueva oportunidad debe verse desde el punto de vista de la recuperación sostenible.
Se basa en algo que parece funcionar: el Banco Nacional de Tierras Agrícolas. "Una herramienta fundamental porque, al ofrecer tierras, implementa las medidas para implementar una agricultura 5.03", dijo el ministro Stefano Pantanelli. Luego habló de nuevos paradigmas pensando en 255 millones de euros de nueva facturación.
Quien gane la tierra dará una nueva huella ambiental en producción y emisiones. Es indiscutible que las tierras recuperadas del sistema agrícola tendrán que formar parte de esa estrategia verde sobre la que Draghi pretende construir la Italia del mañana. Es significativo que el 74% del territorio esté ubicado en las Regiones del Sur, de ahí un impulso y una esperanza.
