Se archiva la primera etapa real de montaña que condujo al maillot amarillo Julio Ciccone y relanzó a Geraint Thomas en la cima de las predicciones para la victoria final, el Tour regresó para un día plano desde Belfort a Châlon-sur-Saone ofreciendo a los velocistas el escenario para otro sprint emocionante. Y el holandés Dylan Groenewegen puso su primer sello en este Tour al final de un sprint de pura adrenalina, superando en el photo-finish a Caleb Ewan que se estaba recuperando como una bala en el forcejeo de los últimos cien metros, codo con codo.
Pero el australiano no consiguió poner su rueda por delante de la del holandés: el cronómetro oficial del Tour marcaba la distancia entre ambos en una centésima de segundo, equivalente a 17 centímetros. Una bagatela que se convierte en abismo si la comparas con los 6 milímetros de diferencia que le dieron a Marcel Kittel la victoria sobre Edvald Boasson-Hagen en la meta de Nuits-Saint-Georges en la Grande Biucle hace dos años. Para Groenewegen es el undécimo éxito de la temporada, a tres cuerpos de las victorias obtenidas en 2018. Ganadores, respectivamente en Colmar y Nancy, ayer Peter Sagan se tuvo que conformar con la tercera plaza que en todo caso afianza su maillot verde como líder de la clasificación por puntos mientras que Viviani no pasó de la sexta plaza por delante de Nizzolo séptimo pero también precedido por Sonny Colbrelli cuarto.
Tres italianos una vez más entre los diez primeros pero el italiano del que todo el mundo habla en el Tour es Giulio Ciccone, por segundo día con el maillot amarillo, un corredor que los medios franceses, empezando por "L'Equipe", han empezado a conocer, descubriendo que es todo menos una carneada. Si bien, las casas de apuestas también se han percatado de que en la clasificación de los jóvenes le citan tercero (puesto en el 12) por detrás de Bernal y Mas mientras que le señalan como el más probable ganador de la clasificación de los escaladores (citado en el 3). En definitiva, la etapa de ayer ha sido tranquila para el ciclista de Abruzzo.
un poco menos para Teejay Vangarden envuelto en una dolorosa caída que podría obligar al estadounidense a abandonar un Tour que ya está comprometido. Recorrido que hoy afronta una etapa complicada, de Mâcon a Saint-Etienne, que prevé una sucesión de "cotes" para un desnivel global de unos 4 mil metros a superar. Una etapa que sugiere ataques y emboscadas, apta para ciclistas como Alaphilipoe, que a 6” de Ciccone es el competidor más temible por su maillot amarillo.
