La Casa Blanca ha recortado las previsiones de crecimiento de EE.UU. La propuesta de presupuesto de 4 billones de dólares enviada esta mañana por el presidente Barack Obama al Congreso establece que el PIB estadounidense debería crecer un 2,6% tanto este año como el próximo. Sería el mejor resultado desde 2005-2006, incluso por encima del +2,4% de 2015, pero las nuevas previsiones son peores que las publicadas hace seis meses: la estimación para 2016 se ha rebajado un 0,3% y la de 2017 un 0,2%.
Las previsiones de la administración Obama son más optimistas que las de los analistas, que prevén un crecimiento del 2,5 % y el 2,4 % respectivamente este año y el próximo, y de la Reserva Federal, que prevé un crecimiento del 2,4 % en 2016 y del 2,2 % en 2017.
“Nuestra economía es la más fuerte del mundo”, escribió Obama en la introducción del documento. En cuanto al desempleo, la Casa Blanca espera que la tasa sea del 4,7 % este año y del 4,5 % el próximo, antes de un regreso gradual al 4,9 % en los próximos diez años. La tasa de desempleo cayó al 4,9% en enero, cayendo por debajo del 5% por primera vez desde febrero de 2008.