“Estoy y he estado muy preocupado. Creo que estaré muy preocupado mañana y la próxima semana también". Atacó al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, sobre la crisis económica de la Eurozona.
Según el jefe de la Casa Blanca, de visita hoy en Canberra, las potencias de la UE deben "apoyar el proyecto europeo". Tras las inyecciones de confianza desde Washington del presidente del Banco Mundial, Zoellick, y del secretario del Tesoro estadounidense, Geithner, las palabras de Obama demuestran cómo en el extranjero se sigue con atención y preocupación la evolución de la crisis de la deuda italiana.