Moody's rebajó el rating de Italia de A2 a A3, con perspectiva negativa. La agencia americana también revisó a la baja los ratings de Portugal (de Ba2 a Ba3), Malta (A2 a A3), España (A3 a A1), Eslovaquia e Eslovenia (ambos de A1 a A2). En todos los casos la perspectiva es negativa. Con respecto a Francia, Reino Unido e Austria, Moody's solo ha revisado la perspectiva (a negativa), manteniendo sin cambios la calificación triple A.
La decisión, tal y como se recoge en la nota de prensa, refleja "los crecientes riesgos financieros y macroeconómicos derivados de la crisis de la zona euro y cómo la exacerbación de estos riesgos crea problemas específicos para los distintos países". Según la agencia, "las perspectivas macroeconómicas europeas son cada vez más débiles, hecho que amenaza la aplicación de las medidas de austeridad aprobadas en los distintos estados y las reformas estructurales necesarias para promover la competitividad".
Por tanto, la decisión de rebajar los ratings de los distintos países se tomó ante "la incertidumbre sobre las condiciones financieras de los países en los próximos trimestres y el consiguiente impacto en su solvencia".
En cuanto a Italia, pesó sobre todo la "incertidumbre sobre las perspectivas de la Eurozona en cuanto a las reformas institucionales del marco fiscal y económico", combinada con el hecho de que La debilidad de las perspectivas económicas europeas "complica la aplicación de programas de austeridad y reformas estructurales necesarias para promover la competitividad".
A esto se suma el hecho de quelas medidas introducidas por el gobierno para promover el crecimiento económico tardarán en dar resultados, aunque difícil de predecir en el estado actual de las cosas".
Otra razón que llevó a la rebaja de Italia es que "El gobierno italiano puede no alcanzar sus objetivos de consolidación y resultar incapaz de reducir su gran deuda pública.“. Sin embargo, Moody`s admite que el plan de consolidación fiscal lanzado por el gobierno de Monti y los esfuerzos en el marco de las reformas económicas "han contribuido a mantener un superávit primario".
