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Mantua: Bertozzi & Casoni, "Dónde Cómo Cuándo"

Las obras de Bertozzi & Casoni, maestros italianos de la escultura en cerámica policromada, se exhibirán en el Palazzo Te de Mantua del 7 de junio al 20 de agosto de 2014. El título de la exposición, comisariada por Marco Tonelli, es “Dove Come Quando”.

Mantua: Bertozzi & Casoni, "Dónde Cómo Cuándo"

Del 7 de junio al 20 de agosto de 2014, las salas del Palacio Te de Mantua acogerán a Bertozzi & Casoni, maestros absolutos de la escultura en cerámica policromada. La exposición, titulada Dove Come Quando, curada por Marco Tonelli, presentará 19 obras típicas del lenguaje expresivo de Bertozzi & Casoni. 

El Palacio Te, con sus salas monumentales, sus frescos, sus decoraciones, el patio interior, las perspectivas de sus jardines, las logias y los estanques de peces con vistas al agua, ha sido un conjunto de espejismos visuales desde su construcción, verdaderos "engaños lúcidos" como definida por ilustres historiadores del arte.

El itinerario expositivo se caracterizará por la presencia de dos esculturas dedicadas a la figura de la Virgen, una silla eléctrica, una Cuccia Brillo, jarrones y terrones con flores, acumulaciones de huesos, animales de tamaño natural, barriles, botiquines, bar mesas, todo en ceramica. Para la ocasión, Bertozzi & Casoni crearán una escultura que hará referencia explícita a los emblemas clásicos de Gonzaga, como la salamandra, el animal simbólico. O harán dialogar sus constelaciones con las representadas en la Sala dei Venti del Palazzo.

En la Sala de los Caballos se encontrará la monumental obra Composición en blanco, un oso polar en una manada, aprisionado por la red que contiene los restos de su horrible comida y los desechos de una expedición polar.

Como corolario, se habilitará un apartado didáctico para desvelar los secretos de su trabajo, acreditando un magistral conocimiento técnico e inventivo.

Bertozzi y Casoni es una empresa fundada en 1980 en Imola por Giampaolo Bertozzi (Borgo Tossignano, Bolonia, 1957) y Stefano Dal Monte Casoni (Lugo, Ravenna, 1961).

Su primera formación artística tuvo lugar en el Istituto Statale d'Arte per la Ceramica de Faenza en un clima dominado por un estilo posinformal "frío" entonces en boga. De mayor interés para ellos son las esculturas figurativas de Angelo Biancini, con quien Bertozzi colabora en el estudio dentro de la escuela, el arte decorativo de Gianna Boschi y el radicalismo conceptual de Alfonso Leoni.
Tan pronto como terminaron sus estudios, Bertozzi y Casoni asistieron a la Academia de Bellas Artes de Bolonia, fundaron una empresa y participaron en eventos que intentaron enfocarse en los protagonistas y razones de una "nueva cerámica".

Destreza ejecutiva y desprendida ironía ya caracterizan sus primeras creaciones en fina mayólica policromada. Es importante la colaboración (1985-1990) con la Cooperativa Cerámica de Imola, donde trabajan como investigadores en el Centro de Experimentación e Investigación de la Cerámica. En 1987 y 1988 colaboraron con "K International Ceramics Magazine" para la que también crearon las imágenes de portada.

En la década de XNUMX, el virtuosismo ejecutivo alcanzó nuevos picos entre obras escultóricas, intersecciones con el diseño y la creación de obras de artistas italianos y europeos establecidos.

En 1990 crearon fuentes y grandes esculturas para una intervención urbana en Tama, un nuevo distrito de Tokio.

De 1993 es el gran panel Dilo con flores colocado en una pared exterior del Hospital Civil de Imola.

En la década de XNUMX surge en su trabajo un aspecto más conceptual y radical: la cerámica siempre toma dimensiones
mayor hasta rayar en la hipérbole lingüística y de realización.

Los críticos y las galerías de arte nacionales e internacionales más importantes se interesan por su obra.

Sus esculturas –simbólicas, burlonas y llenas de atracción por lo fugaz, transitorio, perecedero y decadente– se han convertido en íconos reconocidos internacionalmente de una condición humana no solo contemporánea.
La ironía corrosiva de sus obras se ve siempre contrarrestada por un perfeccionismo ejecutivo indestructible. Entre el surrealismo compositivo y el hiperrealismo formal, Bertozzi y Casoni investigan los deshechos de la sociedad contemporánea, sin excluir los culturales: desde los del pasado hasta los de las corrientes artísticas más cercanas. Iconos como la caja de Brillo examinada por el Pop Art o las latas de Mierda de artista de Piero Manzoni encuentran, en una refinada versión cerámica que indaga en su obsolescencia y degradación, tanto los signos de un tiempo irremediablemente pasado como una congelación en los arreglos que, a la inversa, confiarlos a destinos verdaderamente inmortales.

Desde el año 2000, Bertozzi y Casoni abandonaron el uso de la mayólica para privilegiar, en una especie de epopeya del trash, una gama más amplia de técnicas y materiales cerámicos de origen industrial, variando sus procesos y composiciones.

La presencia física de los objetos y figuras representados atrae por su complejidad conceptual y referencias elípticas, la sugestión aumenta con el descubrimiento del material utilizado y la perfecta mímesis lograda y, finalmente, emergen las implicaciones formales, incluso pictóricas, de predominio figurativo pero básicamente conceptual y abstracto.

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