El 'Brexit' (salida de Gran Bretaña), como se denomina la posibilidad de que Gran Bretaña abandone la Unión Europea, preocupa cada vez más a los banqueros estadounidenses. Quienes, ahora, también están preparando las contramovidas. En el caso de un divorcio británico de Bruselas, informan los gigantes crediticios de la City, están listos para mudarse al extranjero. ¿Dónde? En París, en Frankfurt o, más probablemente, en Dublín, por las ventajas que les ofrece Irlanda en cuanto a idioma, ventajas fiscales y legislación similar.
Londres corre, por tanto, un gran riesgo: en los últimos 15 años alrededor de 250 bancos internacionales, atraídos por un mercado único europeo de 16 billones de dólares, han consolidado sus operaciones financieras en el Viejo Continente en la City.