obras, algunas nunca antes expuesta, por Fattori y Lega, Induno, Favretto, Casorati y Sironi, entre otros.
En esta selección de mujeres retratadas o idealizadas, encontramos a la eterna Eva encarnada en la mujer ahora ángel de la familia o sirena embrujadora, plebeya o burguesa, trabajadora o ama de casa de buena sociedad, feliz y finalmente melancólica.
En ellos reconocemos no sólo la musa inspiradora, pero también la infinidad de otros prototipos estratificados en el imaginario cultural de Occidente. La Virgen María purísima y la Magdalena pecadora, Lía y Marta simbolizando la vida activa con Raquel y María alegorías de la vida contemplativa, la Venus carnal y la Juno maternal, Salomé la seductora y Circe la hechicera.
"Una galería de instantáneas extraídas de un álbum familiar ideal que se ha ido formando en las más diversas épocas de la vida”, anticipa Giuliano Matteucci.
"Figuras que no aspiran a un lugar en el Parnaso y que, más allá de cualquier metáfora, ofrecen el rostro más auténtico, sofisticado y atractivo de la mujer. Imágenes que, aunque compartidas, parecen haber sido robadas en secreto, debido a la facilidad con la que el artista ha dotado a la modelo de una dignidad personal, sacando a relucir su encanto oculto..
"Una galería de anti-divas, en la que la cierta feminidad de una Marie Curie o una Coco Chanel sin duda se sentiría incómoda, ya que es otro tipo de mujer la que se impone, que no tiene dificultad en afirmarse como esposa y madre, en esos papeles, en fin, que en la rutina diaria se ennoblezcan los sentimientos y el espíritu”, destaca de nuevo el curador.
Incluso dos artistas como Hayez y Boldini, que sobre la modelo de Venus sin velos, carnal y sensual, posada por Tiziano, Fragonard, Goya o Courbet, han construido gran parte de su fortuna, aparecen aquí con obras que no dejan lugar a la imaginación.
02 junio 2019 – 03 noviembre 2019 – Viareggio, Centro Matteucci de Arte Moderno
