Airbus se prepara para sorprender a sus pasajeros revolucionando la oferta de entretenimiento a bordo. De hecho, en sus aviones se instalarán nuevos reposacabezas, recién patentados, dotados de una especie de casco que, visto a simple vista, no se diferencia mucho de los que estamos acostumbrados a encontrar en las peluquerías. Pero las apariencias engañan: en cambio, es un dispositivo altamente sofisticado que permite el "aislamiento sensorial" del entorno externo. Gracias a una tecnología similar a la de las Google Glass, el portador del casco se sumergirá así en su propia realidad, en la que podrá ver la televisión, disfrutar de una película, disfrutar de videojuegos, hablar por teléfono con otros” cascos", escuchar música, escribir mensajes y mucho más. El aparato también cuenta con un sistema de circulación de aire en el que es posible introducir olores y perfumes, con el fin de crear un "aislamiento olfativo". Los creadores, insistiendo en esta última propiedad del "reposacabezas", destacan el beneficio que los pasajeros con fobia a volar, o simplemente ansiosos, podrían obtener al inhalar esencias con efecto relajante. También se están estudiando cascos “de lujo”, equipados con la posibilidad de seleccionar imágenes en 3D o vídeos holográficos.
Airbus demuestra que oscila curiosamente entre un concepto de vuelo completamente cómodo y uno decididamente espartano. De hecho, el proyecto de sustituir los asientos tradicionales de la clase económica por sillitas para niños similares a las de las bicicletas viene de la misma empresa, para meter el mayor número posible de pasajeros en el avión, en detrimento del confort y la seguridad.
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