Milán cada vez más hacia China. A la espera de entender cómo evolucionará la situación del Milán, es el Inter quien da un paso más hacia la potencia del Este. A finales de junio, la plantilla general de los nerazzurri se trasladará a Nanjing, metrópoli de 8 millones de habitantes en la provincia de Jiangsu, para concretar la venta del 70% del club al grupo Suning.
Una operación que supondrá unos 600 millones de euros en efectivo, un auténtico golpe de suerte a la vista de un mercado que, de lo contrario, rayaría en unas perspectivas de futuro prohibitivas, pero sobre todo muy importantes. Si la venta de una participación minoritaria a Suning fue en realidad el "secreto a voces", no se puede decir lo mismo de la noticia que surgió ayer (y no ha sido desmentida).
El escenario es más que plausible (en octubre Moratti será libre de vender su 30% y Thohir no tiene intención de hacerse con el club por su cuenta) además de tranquilizador: el Grupo Suning es un gigante que vale 16,2 millones de dólares y Zhang Jindong , el principal accionista, es el 28º hombre más rico de China y el 403º del mundo, con un patrimonio personal de 4,1 millones. Para el Inter sería un salto económico nada indiferente, también porque los chinos, además de la dirección técnica, están dispuestos a asumir todas las deudas.
El futuro del Milan es más incierto, al menos hasta el 15 de junio. De hecho, ese día Berlusconi deberá dar respuestas precisas sobre sus intenciones, hasta ahora bastante nebulosas. Vender o no vender? Este es el dilema del presidente rossoneri y las dudas, en consecuencia, arrastran a todo el club. Todavía no se sabe quién será el próximo entrenador e incluso los objetivos de mercado, sueño de Ibrahimovic al margen, siguen siendo un misterio.
Mientras tanto, en via Aldo Rossi ha llegado un fax del West Ham sobre Carlos Bacca, uno de los pocos con atractivo internacional. Los ingleses han ofrecido 20 millones de euros, Galliani no quiere negociar por menos de 25. En cualquier caso, la puerta está lejos de cerrarse, demostrando que de momento no hay absolutamente ningún intransferible.
Por otro lado, las estrategias de la Juventus son decididamente más claras, decididas a reforzar una plantilla ya ultracompetitiva con elementos de muy alto perfil. Los nombres más candentes son siempre Dani Alves y Mascherano, objetivos declarados ahora por el propio Marotta. “No me escondo del brasileño – admitió el director general de la Juventus. – Hemos centrado nuestra atención en él pero primero tenemos que esperar a que resuelva su relación con el Barcelona. De ser así, detallaremos los aspectos contractuales con el jugador. Mascherano es un perfil muy interesante como André Gomes pero son operaciones difíciles”.
En definitiva, la prioridad es Dani Alves, mientras que el asunto Morata debe resolverse. “Me gustaría volver al Real Madrid y ganar muchos títulos –admitió el español en una entrevista con As.– pero quiero sentirme importante y voy a jugar en un equipo que me lo permita”. No hay puerta en la cara de la Juve, pero queda la sensación de que las maletas ya están hechas.
“Siempre hemos dicho que queríamos centrarnos en Álvaro – explicó Marotta. – Sin embargo, sabemos que la Real tiene derecho a la recompra, así que estamos esperando la reunión con los directivos españoles para entender qué va a pasar”.
