Gran Bretaña podría abandonar la Unión Europea en 2017. El primer ministro, David Cameron, lo ha confirmado hoy y ha explicado que pretende convocar un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la UE. Sin embargo, la consulta solo tendrá lugar si los conservadores vuelven a tener mayoría después de las elecciones de 2015.
“Sería un error preguntar a los ciudadanos si quieren quedarse o irse -explicó Cameron- antes de haber tenido la oportunidad de corregir nuestras relaciones con la UE”. Por ello, los conservadores pedirán al pueblo británico que encomiende al Gobierno a negociar un nuevo acuerdo con los socios europeos en la próxima legislatura. Cameron teme una "crisis de competitividad en Europa" y advierte que "si no respondemos a estos retos, el riesgo es que Europa encalle y que los británicos se encaminen hacia la salida".
En cualquier caso, “la elección será muy sencilla: quedarse o irse – concluyó Cameron -. Hay que elegir con mucho cuidado porque no habría devolución. Sería un billete de ida".
