comparte

Fase 2, ¿dónde están los jóvenes del grupo de trabajo de Colao?

Ni un solo participante en la comisión de expertos designados por Palazzo Chigi para la Fase 2 tiene menos de 35 años. Sin embargo, podría haber sido una oportunidad para empujar a los jóvenes a movilizarse para diseñar el futuro - Pero la cultura gerontocrática de nuestro país no deja lugar a las prioridades de las nuevas generaciones

Fase 2, ¿dónde están los jóvenes del grupo de trabajo de Colao?

En estos días hay mucha discusión sobre los grupos de trabajo encargados de reiniciar el país, su multiplicación y su composición. El escritor tiene 25 años, tiene dos títulos, ha terminado otra pasantía y, como muchos de sus compañeros, está buscando trabajo. Llama la atención observar cómo en el Task Force liderado por Vittorio Colao no hay ni un miembro menor de 35 años y se supone que tampoco la composición de los demás es diferente. Como si los jóvenes, que en cualquier caso representan el 21 % de la población italiana (15-34 años - datos ISTAT 2015), no debieran tener voz en el futuro de un país que necesita reinventarse después la pandemia

No se trata de cuestionar la experiencia y el prestigio de los 17 expertos y técnicos del Task Force, ni de argumentar que ser joven por sí solo hace mejor. La intención es más bien resaltar la ausencia de al menos un miembro que tiene menos de 35 años y que puede compensar su inexperiencia en comparación con los colegas mayores, ofreciendo una perspectiva diferente, una visión más moderna y alternativa.

El debate nacional ha sido monopolizado por el tema de las pensiones durante años. Allá cultura gerontocrática arraigada en este país no deja lugar a las demandas y prioridades de las nuevas generaciones. Las causas son muchas y bien conocidas: desilusión con la política, activa o no (según datos de IPSOS, la tasa de abstención del grupo de edad de 18 a 34 años en las elecciones europeas de 2019 fue del 50,5%), distorsiones estructurales de la sociedad italiana, la grave ausencia de políticas de juventud. A estas carencias se suma la pereza generalizada y la falta de valor de los jóvenes, con el resultado de una generación perdida, individualista, letárgica: con un potencial inconmensurable, pero con el motor al ralentí.

En las próximas semanas, los jóvenes serán los primeros en ser enviados a la "primera línea", según la estrategia de grupos de edad de la fase 2 (algunos ya están allí, como voluntarios, recién graduados en medicina, etc.). Sería deseable que esta implicación suya se corresponda con una mayor responsabilidad y participación en la vida pública. Una vez superada esta crisis, los jóvenes tendrán que ser capaces de incidir en políticas públicas adecuadas a sus necesidades ya una nueva visión del país (si no del planeta). Políticas a la altura de los desafíos de este siglo. Porque “son los jóvenes los que salvarán la tierra. Los jóvenes son el mensaje que enviamos a un mundo que nunca veremos”, como dijo recientemente Renzo Piano. Esta situación excepcional podría empujar a las nuevas generaciones a movilizarse y organizarse para forjar el futuro, su futuro, y “contribuir con método democrático a la determinación de la política nacional” (artículo 49 de la Constitución).

Insertar a un joven en el grupo de trabajo de Colao podría ser un gesto puramente simbólico, pero al mismo tiempo una señal importante: significaría iniciar, en el complicado proceso de una paulatina vuelta a la normalidad, una profunda reevaluación del papel y peso de las generaciones más jóvenes en nuestra sociedad, aprovechar el estallido de esta crisis como una oportunidad de redención.

El siguiente paso podría ser una comisión, o incluso una “Constituyente” menor de 35 años, con el propósito de discutir, imaginar e inventar un futuro de esperanza, sustentable, compartible. Se necesita, y se necesita ahora. Como se escribió en un artículo reciente en el Financial Times publicado por Internazionale (n. 1353) “la redistribución volverá al centro del debate, poniendo en tela de juicio los privilegios de los más viejos y ricos. (…) Los líderes que ganaron la guerra no esperaron el final del conflicto para planificar el futuro”.

Comentarios sobre:Fase 2, ¿dónde están los jóvenes del grupo de trabajo de Colao?"

  1. ¡Gracias Flavio por seguir estos desarrollos!

    Sin embargo, ¡debemos acompañar las reformas con una importante transición cultural!

    Aquí en Alemania, nosotros, los jóvenes estudiantes universitarios, estamos encomendados a empresas que nos guían, nos PAGAN y nos tratan con profundo respeto (aquí no existe el trabajo extra). Aquí nunca falta transparencia sobre nuestro rol y futuro en la empresa.

    Los "más viejos", aquí y en las 3/4 partes de Europa, guían y potencian las fuerzas jóvenes. Del Bel Paese solo escucho hablar de pisoteos e inconsecuencias por parte de los superiores.

    Responder

Revisión