Enel ha anunciado su emisión de bonos híbridos en dólares, como se esperaba. El bono -según indicó ayer Reuters- es a 60 años y exigible a partir del décimo año, aseguran los máximos responsables de la operación.
Al frente de la operación están JP Morgan, Bank of America Merrill Lynch, Barclays, Citi, Credit Suisse, Goldman Sachs, Morgan Stanley, MUSI y Mizuho. El bono vence en septiembre de 2073, siendo el primer call en septiembre de 2023. De no ejercerse el call, se aplicará un incremento al cupón de 25 puntos base. Se aplicará un aumento adicional de 75 puntos básicos si no se ejerce la convocatoria 2043. Después de la primera convocatoria, las convocatorias posteriores se reducirán cada 5 años.
El bono subordinado tiene una calificación esperada de 'Ba1', 'BB+' y 'BBB-' de Moody's, S&P's y Fitch, respectivamente. En cambio, el emisor tiene calificaciones de 'Baa2', 'BBB' y 'BBB+' respectivamente, la primera y tercera con perspectiva negativa, la segunda estable. El bono híbrido tiene la característica de pesar en los balances de los emisores la mitad sobre renta variable y la otra mitad sobre deuda, factor que debería preservar la calificación.
Enel ya había emitido un bono híbrido a principios de septiembre, con un tramo en euros por 1,25 millones y otro en libras por 400 millones. “La emisión en dólares suele oscilar entre 500 y 750 millones de dólares”, dice una fuente cercana a la operación, mientras que para otra podría llegar a los 1.000.
La última emisión híbrida en dólares en Europa es la de Edf que en enero colocó un multitramo incluido uno por 3 millones de dólares con un décimo año call.
