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Elecciones municipales en Francia: el fracaso de las urnas

Las firmas de encuestas se equivocaron en la mayoría de sus predicciones sobre la primera vuelta de las elecciones municipales, que tuvo lugar el domingo en Francia: nadie había previsto la derrota arrolladora de la izquierda ni el gran éxito del Frente Nacional.

Elecciones municipales en Francia: el fracaso de las urnas

A menudo sucede que las encuestas y los pronósticos son víctimas de falsas acusaciones y no reciben el debido crédito. Pero en este caso, con motivo de la primera vuelta de las elecciones municipales, los institutos fracasaron en gran medida. Durante semanas multitud de investigaciones han sostenido que una serie de alcaldes socialistas en ejercicio han escapado de las sospechas que amenazan a nivel nacional a la izquierda gracias a su buena imagen personal y su actuación popular entre los ciudadanos.

De Toulouse a Estrasburgo, de Saint-Etienne a Lille, de Cannes a Angers, un gran número de alcaldes socialistas han sido víctimas de esta ilusión. En casi todo el país, los candidatos socialistas de las grandes ciudades obtuvieron resultados de 6 a 9 puntos por debajo de las estimaciones de las encuestas de opinión. El mayor error parece estar relacionado con Marsella. Mientras los institutos ponían al socialista Patrick Mennucci junto a Jean-Claude Gaudin, la ministra Marie-Arlette Carlotti parecía dispuesta a comprar el tercer sector de la ciudad, decisiva, y en definitiva, la izquierda era humillada por un Frente Nacional más fuerte que nunca.

En contraste con las listas sobrevaloradas de la izquierda gubernamental, también se destacaron las infravaloradas de la extrema derecha. En Avignon, Beziers, Perpignan o Fréjus, el Frente Nacional anotó 8-10 puntos más de lo esperado.

Si los institutos de encuestas no han medido adecuadamente la influencia de la Fuente Nacional, también se debe a que la mayoría de los votantes no están dispuestos a declarar abiertamente su voto. Y también es cierto que las encuestas de opinión no tienen valor predictivo y que muchos votantes eligen en el último momento. Sorprende el abstencionismo récord alcanzado durante la primera vuelta de las elecciones municipales, que las encuestas aún intentan medir con precisión.

El fracaso de tales instituciones debería alentar a los medios a cuestionar el uso de las encuestas. Estas son solo herramientas que a veces son útiles pero a menudo no tienen éxito, por lo que siempre deben usarse con precaución.

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