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Deberes de EE.UU., la UE ataca: "Una afrenta, confiamos en la exención"

Tras la elección de EE. UU. de aplicar aranceles (aunque inicialmente de forma suave) a las importaciones de aluminio y acero, Bruselas ya definió la lista de contramedidas comerciales contra Washington. La reacción más firme proviene de Berlín y París.

Deberes de EE.UU., la UE ataca: "Una afrenta, confiamos en la exención"

Protesta de Europa contra Los aranceles de Donald Trump. Tras la muy firme reacción de China, también llegan desde el viejo continente reacciones sobre la opción proteccionista de EE.UU. respecto a la importación de aluminio y acero. Al día siguiente de la firma oficial del decreto, que de momento prevé aranceles blandos excluyendo a Canadá y México Con miras a una revisión general del tratado sobre el comercio de América del Norte, respondió de inmediato la Comisión Europea, que ya definió la lista de contramedidas comerciales contra EE.UU. para conjurar el golpe.

La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmstroem, se mostró en todo caso cautelosa en su tono: “Europa opta por la vía del diálogo, que es siempre la primera opción para la Unión Europea. Lo que Trump dijo ayer no está muy claro, trataremos de tener más claridad en este punto. Ojalá podamos obtener la confirmación de que la UE estará exenta".

La actitud de otras capitales europeas es decididamente más agresiva. La ministra de Economía alemana, Brigitte Zypries, denuncia el "proteccionismo" estadounidense., considerándolo "una afrenta a socios cercanos como la UE y Alemania y al libre comercio". El portavoz de Angela Merkel habla de una elección "ilegal" de las reglas de la Organización Mundial del Comercio. La propia canciller se muestra preocupada, pero adopta tonos más cercanos a los de Bruselas, añadiendo que "siempre hay que preferir el diálogo" para evitar una guerra comercial porque "nadie la va a ganar".

Francia por su parte "deplora" la decisión del presidente de EE.UU. y, según el ministro de Economía, Bruno Le Maire, la reacción “solo puede ser colectiva a nivel europeo, si queremos que sea efectiva. Una guerra comercial entre los EE. UU. y el resto del mundo solo conducirá a perdedores”.

El primer país que no quiere esta guerra es el principal competidor de EEUU, China, que denuncia un "ataque" al sistema multilateral de comercio. “El abuso de la Cláusula de Seguridad Nacional por parte de Estados Unidos constituye un ataque deliberado al sistema de comercio multilateral encarnado por la Organización Mundial del Comercio y ciertamente tendrá un impacto grave en el sistema de comercio mundial”, dijo el Ministerio de Comercio de China en un comunicado. 'China se opone firmemente', agregó.

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