Eliminar los préstamos morosos en menos de 4-5 años y mejorar la gobernanza racionalizando los órganos de dirección del grupo bancario que surgirá del matrimonio entre Bpm y Banco Popolare: esto es lo que la Autoridad de Supervisión del BCE pide dar el visto bueno definitivo a la primera fusión entre Popolari tras la reforma del gobierno Renzi y la primera que examina la Supervisión de Eurotower entre los bancos nacionales.
En particular, en materia de gobernanza, al BCE le gustaría que el futuro directorio no tuviera 19 miembros sino solo 15 y que la vicepresidencia fuera única y no multiplicada por tres. Pero las propuestas de los dos bancos tienen en cuenta la necesidad de conciliar las necesidades de los territorios y de los actores de las dos realidades. En cualquier caso, aún llevará algunos días, pero, salvo giros inesperados, la celebración de la boda ahora parece estar a la vuelta de la esquina.