Ante la crisis, el BEI ha "apoyado en Italia, desde 2006 hasta hoy, a través de la colaboración con el sistema bancario italiano, a casi 60 pequeñas y medianas empresas, otorgándoles tipos de interés muy atractivos e incluso vencimientos más largos de lo normal". . Así lo subraya el vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones, Dario Scannapieco, ante la Comisión de Industria del Senado.
El escenario esbozado por el representante del BEI se tiñe de gris: “La recuperación económica en Europa se está desacelerando, aunque todavía no se habla de recesión -dijo-. Los riesgos siguen siendo elevados: la crisis de la deuda está asociada a una crisis de confianza en las instituciones europeas. Luego de un repunte tras la crisis de Lehman Brothers, hubo una recuperación que ahora está en riesgo por la crisis de la deuda”, insistió Scannapieco. Con consecuencias sobre la economía real y sobre las pequeñas y medianas empresas “que son una prioridad de inversión para el BEI: aportan una parte muy importante al empleo en toda Europa”, ya que constituyen el 95% de las empresas europeas.
Pero la respuesta real a la cuestión del crédito sigue siendo limitada. El porcentaje de empresas que no han tenido pleno acceso al crédito sigue siendo alto, aunque ligeramente decreciente: 30% en Europa e Italia, con un pico del 40% en España. Los bancos continúan ajustando las condiciones crediticias, incluso cuando la tasa de ajuste se está desacelerando. Pero “el sistema bancario europeo aún no ha salido de la crisis -dijo Scannapieco- y en estas condiciones, el crédito a las pequeñas y medianas empresas está claramente penalizado”. Y por lo tanto, el BEI está “desarrollando sinergias con las otras intervenciones que se han realizado en Italia para apoyar este importante sector de la economía. Ahora estamos trabajando en las cadenas de suministro, en las redes comerciales, para garantizar, explicó Scannapieco a los miembros de la comisión de Industria, que las pequeñas y medianas empresas puedan colaborar más en algunas fases de la cadena de valor.
Por lo que al BEI le gustaría brindar apoyo a aquellas pequeñas y medianas empresas que buscan unir fuerzas para ser un poco más fuertes”. Y las estrategias y retos del BEI para el futuro próximo se resumen en cinco puntos: 1) seguir apoyando a las pequeñas y medianas empresas optimizando la combinación de instrumentos disponibles, tanto nacionales como comunitarios (y en este sentido el BEI participa en el grupo de trabajo del Ministerio de Desarrollo Económico); 2) intensificar la colaboración con Abi, Confindustria, Sace, Cassa depositi e prestiti; 3) promover el crecimiento y la agregación entre empresas; 4) apoyar la investigación y la innovación, también a través del desarrollo de herramientas destinadas a compartir el riesgo de crédito con el sistema bancario; 5) fomentar los proyectos de internacionalización de las empresas italianas a través de la definición de instrumentos de crédito específicos y la capacidad de proporcionar multi-país apoyo
