Los morosos netos que pesan en los balances de los bancos italianos cayeron, en abril, a 77,23 millones desde los 77,85 millones registrados en marzo.
Estos son los números que surgen del informe mensual de Abi.
En detalle, la morosidad neta vuelve a los niveles de febrero (77 millones), los más bajos desde mayo de 2014, y se reduce considerablemente con respecto a finales de 2016 (86,8 millones) y un 13% con respecto al pico alcanzado en noviembre de 2015 (89 mil millones).
Sobre una base anual, la disminución es del 8 por ciento, equivalente a -6,7 millones de euros. En cambio, la tasa neta de morosidad/préstamos disminuyó a 4,42% desde 4,43% en marzo y desde 4,67% en abril de 2016.