comparte

América Latina: vuelta al crecimiento pero la inestabilidad política es un cañón suelto

INFORME del Departamento de Estudios e Investigaciones de Intesa Sanpaolo – La economía latinoamericana volverá a la senda del crecimiento durante el año. Brasil y Argentina cosechan los beneficios de las políticas de estabilización fiscal y monetaria. Los precios de las materias primas exportadas se recuperan pero crece el riesgo político del continente

América Latina: vuelta al crecimiento pero la inestabilidad política es un cañón suelto

En su conjunto, se espera que América Latina regrese a un senda de crecimiento en 2017 (PIB +1,0%) gracias a la salida de la recesión de los países de la costa atlántica (a excepción de Venezuela) mientras que los del Pacífico se prevé que crezcan en 2017 a un ritmo (2,0%) ligeramente inferior al lo observado en 2016, debido a la desaceleración esperada en México, Chile y Perú. Este año se espera que el impulso al crecimiento provenga de la demanda interna, mientras que la demanda externa no contribuiría debido a la recuperación de las importaciones.

Los países del Atlántico, concretamente Brasil y Argentina, están cosechando los primeros frutos de políticas de estabilización fiscal y monetaria recientemente emprendidas y algunas reformas del sistema económico. En el primer semestre de 2017, la dinámica tendencial del PIB en los países del Pacífico se desaceleró a 2% frente a +2,5% en el mismo período de 2016. La economía se vio afectada negativamente por eventos climáticos (inundaciones, incendios por sequía en Chile y Perú) y la relativa debilidad de la demanda de bienes de capital ante la incertidumbre sobre el ciclo de las materias primas exportadas y la política comercial de EE.UU.

El regreso de presiones inflacionarias y la mayor revalorización de los tipos de cambio permitió más recortes en las tasas de interés. Para finales de año se esperan nuevas acciones relajantes bastante generalizadas.

El gradual esperado recuperación del crecimiento y se espera que el pleno despliegue de las medidas de consolidación fiscal inicie, a partir de 2017, un proceso de contracción gradual del déficit y de la deuda pública en relación con el PIB en la mayoría de los países de la región. Si bien Brasil y México tienen una relación deuda/PIB más alta que países con calificaciones similares, los demás están por debajo.

En 2017 el fase de revalorización de las monedas latinoamericanas que comenzó en 2016 (después de la gran depreciación registrada en el bienio 2014-15). La recuperación del tipo de cambio nominal frente a una tasa de inflación todavía relativamente alta condujo a una apreciación generalizada de los tipos de cambio reales efectivos y eliminó algunas de las condiciones de desvalorización en que se encontraban las monedas de los países latinoamericanos. Solo las monedas de los países productores de petróleo, a saber, México y Colombia, permanecen en una condición subvaluada.

In América Latina, en el primer semestre de 2017 se produjo una mejora de la posición comercial y corriente gracias sobre todo a la recuperación de los precios de las materias primas exportadas y a la continuación de la fase de demanda relativamente débil de bienes de equipo e intermedios importados.

De enero a agosto de 2017, todos los índices bursátiles tienen signo positivo y los diferenciales de CDS se han reducido. Este año solo el Chile fue objeto de una rebaja de calificación tanto por parte de Fitch como de S&P. Sin embargo, la deuda de este país mantiene la calificación más alta de la región (A de Fitch, A+ de S&P y Aa3 de Moody's). Con respecto a los demás países, las agencias reconocieron los avances de algunos (principalmente Brasil, México y Argentina) en el camino hacia las reformas y la estabilización del marco macroeconómico, pero confirmaron la evaluación anterior debido a la incertidumbre por los próximos plazos electorales sobre la continuidad de estas políticas.

Revisión