Silvio Berlusconi y Marcello Dell'Utri están nuevamente bajo investigación como posibles instigadores de las masacres mafiosas de 1992 y 1993 por parte de la fiscalía de Florencia. Lo escriben La Repubblica y Corriere della Sera. La Fiscalía, encargada de la investigación de las masacres de 92/93, que ya había abierto investigación sobre Berlusconi en otras dos ocasiones (la última cerrada en 2011), obtuvo del magistrado la reapertura del expediente en su contra tras recibir desde Palermo las interceptaciones de las conversaciones en prisión del capo de la Cosa nostra Giuseppe Graviano, realizado en el marco de la investigación de la llamada negociación Estado-Mafia.
El fiscal de Florencia Giuseppe Creazzo, escriben los dos periódicos, ha delegado la realización de controles a la policía judicial. Los nombres del ex primer ministro y ex senador Dell'Utri, también de él (en prisión por competencia externa en la asociación mafiosa) Graviano hablaría en las interceptaciones, se han ingresado con encabezados que se supone que cubren su identidad, como en las investigaciones previas sobre los presuntos autores intelectuales ocultos de las masacres.