Para dirigir la Agencia de Protección Ambiental (EPA), la agencia que se ocupa de la protección ambiental y la salud de los ciudadanos estadounidenses, Donald Trump ha elegido a un hombre cercano a las grandes petroleras.
Se trata de Scott Pruitt, actual secretario de Justicia de Oklahoma, republicano de hierro y artífice de la batalla legal contra las políticas ecológicas deseadas por Barack Obama. Lo escribe The New York Times, citando fuentes cercanas al equipo de transición del presidente electo.