Israel ha completado la retirada de sus tropas de la Franja de Gaza. Así lo ha anunciado esta mañana el general Moti Almoz, portavoz del Estado judío, precisando que la misión está cumplida: los túneles excavados por Hamás bajo la frontera han sido destruidos.
La noticia de la retirada coincidió con el inicio de una tregua de 72 horas aceptada tanto por Israel como por Hamás gracias a la mediación de Egipto. Sin embargo, Almoz precisó que un pequeño contingente militar permanecerá cerca de la frontera, listo para reaccionar en caso de que Hamás rompa el cese al fuego.
En las próximas horas, 300 camiones deberían ingresar a Gaza: 10 con suministros médicos junto con 5 ambulancias. Las líneas para devolver la electricidad al maltrecho territorio palestino también deberían repararse pronto.
El secretario general de la ONU, Ban ki-moon, y Estados Unidos dieron la bienvenida a la noticia de la tregua. El líder de Naciones Unidas ha pedido a Israel y Hamas que entablen “negociaciones en El Cairo para lograr un alto el fuego duradero, abordando los problemas que están en el origen del conflicto”.
La Casa Blanca, por su parte, calificó la tregua de "importante iniciativa", a la que garantizó "total apoyo". El objetivo es "un alto el fuego duradero: Hamas ahora debe demostrar que respetará el compromiso", explicó el gabinete de política exterior de Barack Obama.
Mientras tanto, desde el comienzo de la ofensiva israelí el 8 de julio, 1.900 palestinos han sido asesinados, incluidos unos 400 niños. Otros 9 resultaron heridos y 285 personas desplazadas solo en los refugios gestionados por la ONU. Sin embargo, el presupuesto parece destinado a crecer. En el frente israelí murieron 64 soldados y tres civiles.
