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Roma-Milán, play-off de la Champions League. Nápoles, oportunidad de oro

Roma y Milan se juegan las últimas opciones de acceder a la Champions League mientras que Napoli, tras los traspiés de Juve e Inter, puede remontar a lo grande en la lucha por el Scudetto si vence al Spal.

Roma-Milán, play-off de la Champions League. Nápoles, oportunidad de oro

La gran oportunidad. Para Napoli, que venciendo a Spal puede volver seriamente a la ronda del Scudetto, para Roma y Milan, cuyo choque parece tanto un playoff por quedarse en la Champions League. Un domingo con vistas a la Champions League. Los partidos de Mazza y Olimpico parecen ser bastante importantes para la parte alta de la clasificación, tanto que muchos incluso han llegado a hablar de un último recurso. Esto es particularmente cierto para el partido en la Capital, una especie de vuelta de adentro hacia afuera para tratar de volver a la parte más prestigiosa del campeonato, todo lo cual también considerando los resultados de Atalanta-Udinese y Fiorentina-Lazio. 

El Milán de Pioli es sin duda el que más juega, por razones obvias en la clasificación, el único que prácticamente ya ha agotado el margen de error. El empate con Lecce, a pesar de ser fruto de una buena dosis de mala suerte, ciertamente no ayudó a calmar el ambiente, aún más incandescente por el ataque, ni siquiera tan velado, de Maldini a la propiedad ("si Elliot cree que va a pon 10 o 15 años para ganar entonces Boban y yo no estaremos"). En breve, solo un resultado positivo ayudaría a los rossoneri a recuperarse, por el contrario, nos encontraríamos ante la certificación de un concurso de acreedores, el enésimo de los últimos 6 años.

“Aquí hay ciertas ambiciones y todo el mundo sabe que tenemos que quedarnos en ciertas posiciones – pasó por alto a Pioli. – Ninguno de nosotros puede darse el lujo de esperar demasiado: tenemos la oportunidad de hacerlo bien y depende de nosotros hacer que el terreno de juego hable. El calendario no me preocupa porque estamos todos centrados en el partido contra la Roma, para afrontar bien el partido y estar en el partido los 95 minutos completos. Podemos hacerlo bien en Roma pero tenemos que intentar ganar contra cualquiera”. En definitiva, el Milan también cree en ello porque se enfrentará a un equipo teóricamente más fuerte pero, en la práctica, cansado y diezmado por las lesiones. 

“El equipo está cansado después de la Europa League, mi preocupación ahora es que los jugadores recuperen fuerzas porque no voy a poder hacer una rotación – admitió Fonseca sin rodeos. – Ahora mismo estoy considerando cualquier posibilidad. Como tengo muy pocos jugadores disponibles, no descarto nada. Estarán más frescos, no jugaron durante la semana". Según el técnico portugués, no hay muchas esperanzas, pero la Roma ciertamente tiene cualidades para suplir las ausencias, sobre todo ante un Milán que da muy pocas certezas. Sobre el papel, se espera un partido abierto y reñido, en el que los ataques pueden marcar la diferencia frente a las defensas.

Los giallorossi, como se mencionó anteriormente, tienen que lidiar con numerosas deserciones pero aún podrán contar con un 4-1-4-1 muy competitivo con Pau López en la portería, Spinazzola, Fazio, Smalling y Kolarov en defensa, Mancini en el centro del campo, Florenzi, Veretout, Zaniolo y Perotti en el trocar, Dzeko en ataque. 4-3-3 habitual en cambio para Pioli, que responderá con Donnarumma entre los palos, Calabria, Musacchio, Romagnoli y Hernandez en la zaga, Paquetà, Biglia y Kessié en el centro del campo, Suso, Leao y Calhanoglu en el tridente ofensivo. Por la tarde, sin embargo, será el turno del Napoli, esperado por una prueba que puede encaminar su campeonato, en un sentido u otro. 

Los empates de Juve e Inter le entregan una oportunidad bastante tentadora para acortar el rankingsiempre que, sin embargo, venzan a Spal y lo aprovechen. Ancelotti, silencioso como siempre tras los partidos de Champions, es muy consciente de que oportunidades como esta no se dan a menudo, sobre todo porque los jugadores de Ferrara son parientes lejanos de los del año pasado, como demuestran las cuatro derrotas acumuladas en los últimos cinco partidos. En definitiva, se necesitan los 3 puntos pero eso no cambiará las ideas del técnico azulón, que ha decidido confirmar la rotación habitual. El 4-4-2 del Napoli verá a Meret en la portería, Malcuit, Luperto, Koulibaly y Di Lorenzo en defensa, Callejón, Zielinski, Fabián Ruiz e Insigne en el centro del campo, Milik y Mertens en ataque. Semplici intentará la hazaña apoyándose en un 3-5-2 con Berisha entre los palos, Tomovic, Vicari e Igor atrás, Sala, Missiroli, Valdifiori, Kurtic y Reca en el centro del campo, detrás de la dupla ofensiva formada por Floccari y Petaña. 

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